Bruselas, 18 ene (EFE).- Los ministros de Agricultura de la Unión
Europea (UE) han acordado hoy impulsar medidas para mejorar el
reparto del "valor añadido" en los precios de los alimentos para que
se vean más beneficiados los eslabones más débiles de la cadena de
producción, como agricultores o consumidores.
Los Veintisiete han debatido sobre los problemas en la fijación
de los precios alimentarios, como la especulación o las diferencias
entre productores y supermercados, durante el primer Consejo de
Agricultura de la UE del semestre presidido por España.
La ministra española de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino,
Elena Espinosa, ha declarado, en calidad de presidenta del Consejo,
que "la mayor parte de los países" han respaldado actuaciones para
mejorar los márgenes en los precios y las contraprestaciones para
"aquellos eslabones más débiles", como los agricultores.
Según fuentes comunitarias, los ministros han apoyado, en
general, iniciativas en ese ámbito e incluso países liberales como
el Reino Unido se han mostrado a favor de un seguimiento de precios
más detallado para ver cómo evoluciona el coste de un producto desde
su origen hasta que llega al supermercado.
El Consejo se ha posicionado cerca las de propuestas presentadas
por Bruselas con ideas para buscar soluciones a las desigualdades en
los beneficios por el coste de la comida.
Los Veintisiete han discutido sobre la posibilidad de compartir
"medidas nacionales" y emprender otras a escala comunitaria para
mejorar la transparencia en lo que respecta a tales cotizaciones.
También han hablado sobre prácticas de competencia desleal y
desequilibrios en los contratos entre el agricultor, la industria y
la distribución.
Por ejemplo, Espinosa ha citado la idea del observatorio de
precios, que ya existe en España y en otro países, pero aunque esa
información está disponible por internet no se conoce, por lo que
los Estados podrían compartirla para ver en qué productos hay
"mayores distorsiones" de la competencia.
Asimismo, el Consejo de Agricultura de la UE va a seguir
debatiendo este asunto en grupos de expertos como el Comité Especial
de Agricultura y a largo plazo, ha explicado Espinosa, se podrían
impulsar propuestas legales para mejorar las relaciones comerciales
en la cadena de producción alimentaria.
Durante este semestre se esperan conclusiones de los dos Grupos
de Alto Nivel de la UE que ahora mismo estudian de cerca esta
cuestión: el grupo sobre competitividad y el que se ha creado
específicamente para abordar la crisis del sector lácteo, provocada
por los bajos precios abonados al ganadero.
Espinosa ha diferenciado iniciativas como la relacionada con el
observatorio de los precios compartido, que podrían emprenderse
antes, frente a proyectos legislativos a escala de la UE, que
tardarían más porque deberían ser aprobados por el Consejo de
ministros y por el Parlamento Europeo.
Entre los países ha habido acuerdo salvo en cuestiones como la
indicación del origen de los productos, con estados del sur más
favorables frente a los del norte, que son más reacios, según una
fuentes comunitaria.
La agricultura, la industria de transformación y la distribución
alimentaria representan un 5% del valor añadido de la UE y el 7% de
su empleo.
El consejero de Agricultura de Cataluña, Joaquim Llena, ha
asistido al Consejo como representante de las comunidades autónomas.
Llena defendió la necesidad de una "transparencia" en la cadena
de producción alimentaria para darle cierta "racionalidad" a la
fijación de los precios. EFE