Madrid, 11 ene (EFE).- Las empresas españolas con intereses y
negocios en Venezuela, como Telefónica, Repsol, Banco Santander o
BBVA, restaron hoy importancia al efecto que pueda tener en sus
cuentas la devaluación del 50 por ciento del bolívar anunciada el
pasado viernes por el presidente del país, Hugo Chávez.
La empresa española más afectada por esta decisión es Telefónica,
que cuenta con dividendos pendientes de su conversión desde 2006
cuya cantidad en bolívares superaba los 2.000 millones de dólares
antes de la devaluación.
Por ello, los títulos de Telefónica lideraron esta mañana las
caídas del Ibex-35, con un descenso que llegó a ser del 2,87 por
ciento, ante las previsiones de una reducción de ingresos en
concepto de dividendo próxima a los 1.000 millones de euros a través
de su filial CANTV.
No obstante, la compañía que preside César Alierta confirmó ante
la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) todas sus
previsiones de rentabilidad a corto y medio plazo y sus objetivos de
dividendos hasta 2012, pese a admitir que la devaluación afectará a
sus ingresos.
Repsol, otra de las empresas con intereses en la zona, aseguró
que la devaluación tendrá un impacto "inapreciable" en sus cuentas,
ya que la inmensa mayoría de sus ingresos en Venezuela se
contabilizan en dólares.
En concreto, la petrolera hispano argentina explicó que la venta
de productos petrolíferos -su principal negocio- se realiza en
dólares y que sólo ingresa en moneda local unas pocas partidas de
escasa magnitud.
La eléctrica Iberdrola también descartó hoy que la devaluación
afecte a sus ingresos, ya que su negocio en el país se basa en la
construcción de infraestructuras energéticas con contratos "llave en
mano" -a precios cerrados-, que cuentan con garantías y que cobra en
dólares.
En cuanto al BBVA, los expertos consideran que el impacto de la
devaluación del bolívar puede quedar "bastante solapado" en las
cuentas de la entidad, ya que el Banco Provincial, su filial en
Venezuela, sólo supone el 4 por ciento del beneficio atribuido del
grupo.
Sin embargo, señalan que este banco, al igual que otras
compañías, tenía dividendos del ejercicio anterior pendientes de
repatriar y que ahora mermarían con un cambio menos favorable.
Por su parte, el otro gran banco español, el Santander, se libra
de la decisión de Chávez ya que el mes pasado recibió el último pago
por parte del Gobierno de Venezuela por la nacionalización de su
filial en ese país a cambio de 1.050 millones de dólares (unos 750
millones de euros).
Pese a todo, los títulos de todas estas compañías, con la
excepción de Telefónica, registraron esta mañana alzas en el mercado
bursátil.
El pasado viernes, Chavez anunció la devaluación de la moneda
nacional, hasta ahora en 2,15 bolívares por dólar, de forma que
desde ahora regirá con dos tipos oficiales de cambio: uno de 2,6 y
otro de 4,3 bolívares, siempre en el marco del control estatal de
divisas en vigor desde 2003.
La cotización de 2,6 bolívares se aplicará a las importaciones
prioritarias, entre ellas las del sector de los alimentos, la salud,
el de maquinarias y equipos, ciencia y tecnología y todas las
importaciones del sector público, así como remesas familiares o
recursos de consulados y embajadas acreditadas en Venezuela.
"Para todo el resto", dijo el Chávez, se utilizará una paridad de
4,3 bolívares por dólar, que llamó "dólar petrolero" y que afectará
a productos como los energéticos, industriales, petroquímicos,
automóviles, comercio o telecomunicaciones. EFE