Redacción de Economía, 28 abr (EFE).- El temor de los inversores
a que Grecia suspenda pagos presionó hoy a las principales bolsas
europeas, que registraron pérdidas superiores al 1 por ciento.
La mayor caída correspondió al parqué español, que bajó el 2,99
por ciento, afectado al final de la sesión por la rebaja de la
calificación de la deuda española por Standard and Poor's, decisión
adoptada después de hacer lo mismo ayer con Grecia y Portugal.
La agencia de medición de riesgos situó la nota del crédito
español en "AA" con perspectiva negativa, frente a la puntuación
"AA+" anterior, porque cree que España podría sufrir un "periodo
adicional de crecimiento débil".
El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero,
dijo hoy en el Congreso que es "posible" que la economía haya
crecido ya entre enero y marzo. Respecto a la evolución del empleo,
el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, aseguraba que los datos
del paro de abril serán "previsiblemente buenos".
Del resto de las mayores plazas europeas e índices europeos
destacó la caída del indicador Euro Stoxx 50, el 1,81 por ciento;
mientras que Milán bajó el 1,53 por ciento; París, el 1,5 por
ciento; Fráncfort, el 1,22 por ciento, y Londres, el 0,34 por
ciento.
En estos descensos influyó la noticia de que Grecia necesitará
hasta 135.000 millones de euros los próximos tres años, el triple de
lo calculado inicialmente y que se preveía destinar por la Comisión
Europea y del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Esta nueva, anunciada por el ministro alemán de Economía, Rainer
Brüdeler, tras la reunión en Berlín del gobierno alemán y
responsables del FMI y del Banco Central Europeo, incidió en la
cotización del euro y en la negociación de la deuda.
La moneda única europea bajaba hasta el mínimo anual de 1,314
dólares y en el mercado de deuda se veía cómo la rentabilidad de la
deuda griega a largo plazo superaba el 11 por ciento, mientras que
el diferencial de estos bonos con Alemania, que mide el sobrecoste
que se carga para adquirir estos títulos, subía a 829 puntos
básicos.
Además, en el retroceso bursátil influyó el miedo de los
inversores a que el deterioro de las finanzas públicas griegas se
contagie a otros países, como Portugal -su bolsa bajó hoy el 1,89
por ciento- o España.
Los buenos resultados trimestrales presentados hoy por varias
empresas, como Iberdrola, Shell, Infineon, SAP o Merck, no pudieron
cambiar el rumbo de las plazas europeas.
La subida de Wall Street, alrededor del 0,4 por ciento al final
de la sesión bursátil europea, sirvió para amortiguar la caída de
las plazas del Viejo Continente.
En cuanto a la evolución de los principales valores europeos, los
integrantes del índice Euro Stoxx-50, que recoge la evolución del
medio centenar de empresas más capitalizadas de la zona euro, sólo
subió una compañía, BNP Paribas, el 0,49 por ciento, en tanto que la
cervecera AB Inbev repitió cotización.
Fueron los bancos españoles los que encabezaron las pérdidas, con
BBVA en primer lugar con un retroceso del 4,76 por ciento, seguido
del Banco Santander, que cedió el 4,18 por ciento, mientras que ING
bajó el 3,89 por ciento y Unicredito, el 3,62 por ciento. EFE