Washington, 14 jun (EFE).- América Latina aún se mantiene lejos
de la era de la digitalización y la sociedad de la información al
necesitar 20 millones de líneas de banda ancha más para
corresponderse con sus índices de desarrollo económico.
El libro "El papel de las TIC en el desarrollo", del profesor de
la Escuela de Negocios de la Universidad de Columbia, Raúl Katz,
revela esta brecha, que el autor explicó hoy en la presentación del
trabajo en Washington.
La obra, que forma parte de la Colección Fundación Telefónica,
fue introducida por Iñaki Urdangarín, Duque de Palma, en su cargo de
presidente de la Comisión de Asuntos Públicos de Telefónica
Latinoamérica.
En opinión del autor, la dimensión de la brecha entre la
penetración de la banda ancha y el crecimiento económico de los
países de Latinoamérica es "alarmante".
La mayor porción de ese déficit, que sólo se podría reparar con
una duplicación del despliegue actual de esta infraestructura, se
concentra en Brasil (39%), México (24%) y Venezuela (7%).
Este gran reto, que el autor considera estratégico para una
economía basada en la información, tiene como mayor obstáculo el
desafío de accesibilidad en función de precios.
Y es que si se comparan los precios en América Latina con el de
muchos países del mundo, los primeros son más caros, lo que limita
su accesibilidad por parte del mercado residencial.
El estudio compara las tarifas por bit con un índice de paridad
de precios (el costo de una hamburguesa de McDonald's) y concluye
que el acceso al cable en Perú y el de la ADSL en Chile, Perú y
Colombia son más altos de lo que deberían ser.
Otro de los obstáculos son los impuestos, apuntó en su
presentación, sobre lo que destacó el caso de Brasil, donde el
gravamen al uso de la banda ancha puede llegar hasta el 25 y 10%.
En cuanto a la situación general, la penetración de la banda
ancha en Latinoamérica fue de un 4,5 por ciento en 2008, muy por
debajo del resto de continentes, como Asia (14%), Europa (24,8%) y
América del Norte (27,8%), y que sólo supera a África, que cuenta
con un 1,15 por ciento.
Por países, Chile es el país con más desarrollo de esta
infraestructura, con un 8,8%, por delante de Argentina (7,8%) y
Uruguay (7,4%).
Según Katz, la región continúa con un proceso "incompleto" que
debe ser reparado mediante una competencia "saludable" y políticas
marco de las instituciones públicas que aceleren y faciliten la
consolidación de estos sectores. EFE