Brasilia, 14 jul (EFE).- El presidente de la Confederación
Nacional de la Industria (CNI) de Brasil, Robson Andrade, afirmó hoy
que las divergencias al interior del Mercosur impiden que el
Gobierno brasileño pueda avanzar más rápido en las negociaciones de
un acuerdo de libre comercio con la Unión Europea (UE).
"Si estuviéramos solos, sería más fácil", afirmó el presidente de
la principal patronal de los industriales brasileños en un
pronunciamiento durante el IV Encuentro Empresarial Brasil-Unión
Europea, que se realiza hoy en la sede de la cancillería brasileña.
"Es claro que juntos somos más fuertes económicamente, pero, por
otro lado, tenemos divergencias con Argentina, con Uruguay, con
Paraguay..." que impiden avanzar en negociaciones con terceros
países, afirmó el líder empresarial.
El Mercado Común del Sur (Mercosur), bloque que reúne a
Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, y al que Venezuela está en
proceso de adhesión, reinició el mes pasado unas viejas
negociaciones para establecer un acuerdo de libre comercio con la
Unión Europea.
El encuentro entre empresarios brasileños y europeos se realiza
en forma paralela a la IV Cumbre Brasil-UE, que reúne hoy en
Brasilia al jefe de Estado brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, con
los presidentes del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, y de la
Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso.
Los tres líderes, que en su agenda tenían previsto dialogar sobre
asuntos bilaterales e internacionales, con énfasis en las
negociaciones para un acuerdo comercial entre el bloque comunitario
y el Mercosur, participarán este mismo miércoles en la clausura de
la reunión de empresarios.
Según Andrade, el poco avance de las negociaciones brasileñas
para acuerdos de libre comercio obedece a que tienen que ser hechas
por intermedio del Mercosur "y eso dificulta los acuerdos".
El presidente de la CNI aseguró que las negociaciones entre el
Mercosur y otros países avanzan muy lentamente no sólo por las
divergencias en el bloque suramericano sino también por el
proteccionismo que resurgió con la crisis económica mundial.
"Somos una economía de mercado abierta y hemos enfrentado
problemas con mercados de economía más cerrada, incluso con barreras
no arancelarias", se quejó el líder de los industriales brasileños.
Según el dirigente, la crisis económica redujo la demanda europea
de productos brasileños.
"Necesitamos discutir eso para abrirle mercados a las empresas
brasileñas", afirmó.
Las negociaciones entre la UE y el bloque suramericano fueron
retomadas hace un mes, tras casi seis años paralizadas, y el
Gobierno brasileño ha expresado su interés en que sean concluidas
antes de diciembre próximo.
No obstante, la crisis que afecta a Europa y unas polémicas
medidas aplicadas por Argentina con la intención de proteger a su
sector agroalimentario han creado nuevas trabas en la negociación.
EFE