Londres, 14 jun (EFE).- El ministro británico de Energía, Chris
Huhne, anunció hoy que el Reino Unido revisará los procedimientos
para la extracción de petróleo en aguas profundas después del
vertido de una explotación de la petrolera BP en el golfo de México.
En una declaración leída ante la Cámara de los Comunes (cámara
baja del Parlamento), Huhne manifestó que ya se ha llevado a cabo
una "urgente revisión de los procedimientos" y que las autoridades
estarán especialmente "vigilantes" coincidiendo con el inicio de la
exploración en aguas profundas en las islas Shetland (Escocia).
"Revisaré nuestros nuevos y existentes procedimientos tan pronto
como haya un análisis detallado de los factores que causaron el
incidente en el golfo de México", declaró el ministro.
Como ya hiciera en los últimos días el primer ministro, David
Cameron, Huhne dijo entender la frustración del Gobierno de EEUU por
la situación en el golfo de México e insistió en que BP sigue siendo
una compañía "sólida", dispuesta a detener el vertido y a limpiar
sus consecuencias en las costas del sur de Estados Unidos.
El ministro se refirió a BP como "una empresa
anglo-estadounidense", ya que el 39 por ciento de sus acciones están
en manos de accionistas en Estados Unidos, e instó a "aprender la
lección que nos han dejado estos trágicos eventos".
Huhne reiteró que la fuga de petróleo por el colapso de la
plataforma petrolífera Deep Horizon no se podrá detener por completo
"hasta el mes de agosto como muy pronto, cuando el primer pozo de
auxilio que BP ya está perforando permita cegar el pozo original".
El responsable de Energía del Gobierno británico equiparó el
desastre con el vertido al mar cada semana de "una cantidad de
petróleo equivalente al desastre del Exxon Valdez" y lamentó que BP
haya tenido "un éxito parcial hasta ahora" para detener la fuga.
"Pero tengo constancia del sólido compromiso público de la
compañía con sus obligaciones, con la tarea de detener el vertido y
con el pago de todas las reclamaciones legítimas por los daños
causados", concluyó el ministro de Energía.
Sobre la concesión de dividendos a los accionistas, Huhne
consideró que es una cuestión empresarial en la que no debe entrar
el Gobierno, y sobre el impacto de la crisis en los planes de
pensiones de miles de británicos, dijo que es "limitado".
Las acciones de la petrolera sufrieron otro revés bursátil a
causa de la crisis del vertido y cerraron en la Bolsa de Londres en
la jornada de hoy con una caída de 36,45 peniques, hasta los 355,45,
un retroceso del 9,3% con respecto al cierre del viernes.
Esto supone que BP ha perdido en un día 7.000 millones de libras
(8.400 millones de euros) en valor accionarial, volviendo a poner
por encima del 40% las pérdidas desde el inicio de la crisis. EFE