Nueva York, 28 sep (EFE).- El aterrizaje de emergencia que el
pasado fin de semana realizó en el aeropuerto neoyorquino de John
Fitzgerald Kennedy (JFK) un avión de la compañía Delta fabricado por
Bombardier es el quinto incidente de ese tipo que sufren naves
creadas por esa compañía canadiense en menos de dos años.
Las aeronaves creadas por ese gran fabricante ferroviario y
aeronáutico para su serie CRJ han protagonizado desde diciembre de
2008 cinco incidentes relacionados con problemas en sus trenes de
aterrizaje y que han derivado en tomas de tierra de emergencia,
publica hoy el diario neoyorquino Daily News.
Esa cifra es llamativa si se compara con la registrada por el
conjunto de aviones fabricados por otras compañías, que en el mismo
periodo sólo han experimentado, según detalla el rotativo, dos
problemas similares.
El incidente más reciente fue el protagonizado el sábado pasado
por el vuelo de Delta 4951, entre Atlanta (Georgia) y el aeropuerto
neoyorquino de Westchester, que finalmente tuvo que aterrizar de
emergencia en el JFK sin que hubiera ningún herido.
Cuando el avión se acercaba a Nueva York, el piloto se dio cuenta
de que una de las ruedas de aterrizaje no bajaba e informó a los
pasajeros de un posible impacto en el ala derecha del avión en el
momento de tomar tierra.
Las imágenes grabadas por uno de los viajeros del incidente, que
se han emitido en todas las televisiones del país, muestran los
momentos de tensión vividos durante el aterrizaje y rinden cuenta
del fuerte movimiento que experimentó la nave durante su llegada a
tierra, así como las peligrosas chispas que saltaron cuando el avión
tomó tierra.
Este incidente ha puesto en el punto de mira a Bombardier, el
mayor fabricante de material ferroviario del mundo y el tercer mayor
fabricante de aviones, debido al historial de incidentes similares
sufridos por sus naves recientemente, según destaca el Daily News.
El rotativo neoyorquino detalla que en diciembre de 2008 un
aparato CRJ-900 de Mesa Airlines tuvo un problema similar y aterrizó
de emergencia en Chicago (Illinois), una operación parecida a la que
efectuó en junio de 2009 un CRJ-200 que realizaba un vuelo de
conexión de Delta operado por Atlantic Southeast Airlines y que tomó
tierra con problemas en Atlanta (Georgia).
En abril de ese mismo año una de esas mismas naves operada por
South Africa Express sufrió un problema similar y aterrizó en un
aeropuerto de Namibia.
Antes del incidente del pasado fin de semana, el último problema
para una nave de Bombardier se produjo el pasado mayo en un avión
CRJ-200 de Skywest Airlines que se dirigía a Ontario (California),
donde también aterrizó de emergencia tras detectarse problemas con
el tren de aterrizaje.
Ninguno de estos incidentes provocó heridas graves a los
pasajeros gracias en parte a la pericia de los pilotos, quienes
siguieron las directivas de seguridad para realizar los aterrizajes.
EFE