Nueva York, 3 jun (EFE).- Los medios de comunicación escritos de
Estados Unidos frenarán en 2010 la caída en los ingresos por
publicidad, uno de los causantes de la crisis que sufren, y el
descenso se situará entre un cinco y un diez por ciento, informó hoy
la agencia Moody's en su último informe sobre el sector.
Las cifras divulgadas por esa firma muestran que la facturación
derivada de publicidad sigue descendiendo en los diarios y
periódicos estadounidenses, pero a un ritmo menor que en 2009,
cuando el descenso fue del 22 por ciento, y que, según prevé la
agencia, conseguirá estabilizarse en 2011.
"Los ingresos por publicidad en el sector de los diarios y
periódicos descendió un nueve por ciento en el primer trimestre del
año, y debería bajar entre un cinco y un diez por ciento en 2010,
una gran mejora frente a 2009", explicó Moody's en un informe en el
que califica de "estable" su perspectiva para esa industria.
Las cifras son así positivas si se comparan, además de con 2009,
a las de 2008, cuando el descenso fue del 16 por ciento. Según
Moody's, esos fueron "los dos peores años para la industria desde la
época de la Gran Depresión".
"El cambio clave registrado este año es el repunte de la
economía" de EE.UU., señalan los expertos de Moody's, quienes
aseguran que, según sus cálculos, el Producto Interior Bruto (PIB)
de este país va camino de crecer de un 2,5 por ciento a un 3,25 por
ciento en 2010 y 2011, tras caer un 2,4 por ciento el pasado año,
"una expansión que ayudará a que los negocios aumenten sus gastos en
publicidad".
El informe detalla que en cuanto al próximo año espera que la
facturación registre entre un descenso del tres por ciento y un
avance del dos por ciento, aunque alerta de que en 2012 la tendencia
a la recuperación podría detenerse y regresar a las pérdidas, por lo
que la previsión de Moody's para la industria es "negativa a largo
plazo".
La agencia asegura así que, pese a la recuperación inicial, los
ingresos por publicidad no regresarán a los niveles existentes
"antes de la recesión", ya que el dinero publicitario cambia ya de
los anuncios en prensa escrita a los de Internet, donde los precios
son más bajos. EFE