Bruselas, 10 sep (EFE).- Los ministros de Agricultura de la UE
debatirán sobre la reforma de la Política Agrícola Común (PAC), en
una reunión informal en Bélgica entre los días 19 y 21, en espera de
las primeras propuestas que la Comisión Europea (CE) presentará este
otoño.
Los responsables agrícolas se posicionarán, en un Consejo no
decisorio que se celebrará en La Hulpe (Bélgica), acerca del futuro
de las ayudas de la PAC, la política que más absorbe del presupuesto
comunitario, con España como segundo país más beneficiado.
Los ministros se reúnen por primera vez después de la pausa
vacacional, para analizar cuál debe ser la dirección de la PAC,
mientras la CE prepara su proyecto sobre la reforma, que
previsiblemente hará público el 17 de noviembre.
Esta discusión se produce después de la consulta pública que
promovió el comisario europeo de Agricultura, Dacian Ciolos, para
recabar opiniones de cara a la reforma, que se aplicará a partir de
2014, momento en que acaba el actual presupuesto comunitario.
La presidencia belga de turno de la UE ha pedido a los
Veintisiete que contesten a dos preguntas, una sobre el futuro de
las ayudas directas de la PAC y otra sobre cómo debe responder esa
política a retos como las crisis económicas o la situación especial
de cada región, según el documento de trabajo para la reunión
informal.
Bélgica menciona, en el texto, las ideas más frecuentes sobre el
objetivo de las subvenciones, como por ejemplo garantizar ingresos a
los agricultores, el abastecimiento de alimentos ó la mitigación del
cambio climático.
Los ministros deberán pronunciarse sobre las medidas para que la
PAC sea más moderna y fácil de gestionar.
La presidencia ha subrayado que la conclusión de los debates que
ha habido hasta ahora es que la PAC "debería seguir siendo una
política importante y una contribución esencial para la estrategia
Europa 2020, destinada a la recuperación económica".
Entre las áreas que, según la presidencia, en la que hace falta
actuar figuran medidas para garantizar el abastecimiento de la UE
sin dañar las economías de los países en desarrollo; el
mantenimiento del empleo rural y una mejor distribución de los
subsidios.
En el documento, la presidencia también alude a la importancia de
frenar la volatilidad de los mercados e insiste en la mejora de la
"transparencia" en los precios y en las relaciones en toda la cadena
alimentaria, es decir, agricultores, industria y supermercados.
Señala que la mayoría de países y sectores consideran que los
cambios en la PAC se hagan "gradualmente", adaptados a cada tipo de
agricultura y a las distintas regiones. EFE