Roma, 15 jun (EFE).- Los precios de los productos agrícolas
aumentarán entre 2010 y 2019 con respecto al decenio anterior aunque
sin llegar a los picos de 2007-2008, según el último informe de
perspectivas para la agricultura elaborado por la OCDE y la FAO.
El informe, presentado hoy en Roma, resalta que las previsiones
de este año son más positivas que en 2009, aunque desde ambas
organizaciones se insiste en la necesidad de que los gobiernos tomen
medidas para asegurar que los agricultores dispongan de mejores
herramientas para afrontar posibles riesgos futuros.
El documento conjunto de la Organización de las Naciones Unidas
para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y la Organización para
la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) precisa, además, que
tanto el aumento de la producción como del consumo de productos
agrícolas estarán encabezados por los países emergentes.
Países cuyo rol internacional adquiere cada vez más peso, por lo
que su contribución a las políticas mundiales se convierte en
"crucial".
La OCDE y la FAO calculan que en los próximos diez años los
precios del grano y de los cereales secundarios aumentarán una media
de entre el 15 y el 40 por ciento en términos reales, con respecto
al periodo de referencia de 1997-2006.
El aumento de los aceites vegetales se cifra en torno al 40 por
ciento, mientras que los productos lácteos lo harán entre un 16 y un
45 por ciento.
El documento destaca que entre los factores que juegan un papel
importante en el incremento de los precios y de la demanda se
encuentra el crecimiento económico sostenido a largo plazo de los
mercados emergentes, así como el aumento de producción de
bioenergía.
Un aumento, éste último, sostenido, entre otros, por los altos
precios del petróleo y por las políticas de desarrollo y de
incentivos promovidos en países como Estados Unidos o la Unión
Europea.
Otro de los datos más significativos que aporta el informe
refiere que la producción agrícola crecerá más lentamente en los
próximos 10 años que en el decenio anterior, aunque se mantendrá en
línea con el crecimiento demográfico.
En este ámbito, las estimaciones de la FAO y de la OCDE confirman
que el aumento de la producción alcanzará el 70 por ciento necesario
para satisfacer la demanda de la población en 2050.
Así, durante la presentación del documento el secretario general
de la OCDE, el mexicano Angel Gurría, explicó que no se prevé una
situación en la que el crecimiento demográfico sea más alto que el
de la producción, aunque destacó la importancia de que los gobiernos
lleven a cabo políticas adecuadas para apoyar la producción.
Brasil será el país que entre 2010 y 2019 liderará el aumento de
la producción agrícola, con un incremento del 40 por ciento,
mientras en países como China, India, Rusia y Ucrania éste rondará
el 20 por ciento.
A pesar de esta perspectiva, el documento recuerda que los picos
alcanzados por los precios y la crisis económica han llevado a un
aumento de personas que pasan hambre en el mundo, que en 2009 superó
los mil millones de personas.
Así, el informe insiste en que son necesarias inversiones
orientadas a aumentar la producción y la productividad para afrontar
esta situación y destaca que un sistema comercial con reglas claras
que permita la transferencia de los productos agrícolas desde las
zonas con excedente de producción a aquellas donde ésta es
deficitaria será un elemento decisivo.
El informe presta además especial atención a la volatilidad de
los precios y establece que mientras ésta a corto plazo es ahora
elevada, no hay evidencias concluyentes sobre su comportamiento a
largo pazo para los principales cultivos alimentarios. EFE