Sao Paulo, 22 abr (EFE).- Los productores de pollo brasileños,
que son los mayores exportadores de aves del mundo, "repudiaron" hoy
las declaraciones del presidente de Bolivia, Evo Morales, quien
vinculó el consumo de ese producto con la homosexualidad.
"La Asociación Brasileña de Productores y Exportadores de Pollo
(ABEF, por sus siglas en portugués) manifiesta su repudio a las
declaraciones del presidente de Bolivia, Evo Morales, y a las
críticas infundadas que hizo a la carne de pollo industrializada",
dijo esa institución en un comunicado.
El pasado martes, en la inauguración de una cumbre social sobre
el cambio climático, Morales aseguró que "el pollo que comemos está
cargado de hormonas femeninas" y que, por eso, "cuando los hombres
comen esos pollos, tienen desviaciones en su ser como hombres".
También afirmó que por culpa de los pollos y del ganado vacuno
criado con hormonas, las niñas tienen un desarrollo prematuro del
busto.
"Conocido por sus posiciones polémicas", Morales "revela su
desconocimiento respecto a esta importante proteína animal, que
tiene una presencia indispensable en la mesa de todos los pueblos, y
especialmente en las capas más desfavorecidas de las sociedades, a
las que el presidente de Bolivia dice defender", sostuvo la ABEF.
Asimismo, la organización criticó los "comentarios prejuiciosos"
de Morales en relación a la homosexualidad y señaló que es "extraña"
esa posición en un "líder populista" que "dice querer favorecer a
los excluidos".
Los criadores de pollos brasileños recordaron que su país es el
mayor exportador mundial de carne de pollo, que abastece a 153
naciones del mundo y apuntó, con cierta ironía, que hoy uno de sus
"grandes clientes" es Venezuela, uno de los aliados políticos
estratégicos de Bolivia.
"En relación específicamente a la supuesta presencia de hormonas
en la carne de pollo, la ABEF reitera que es un mito", se dice en la
nota, la cual aclara que "en Brasil, la expansión de la producción
de esas aves se debe a la alimentación, exclusivamente, a base de
maíz y soja".
Según la Asociación Brasileña de Productores y Exportadores de
Pollo, "la ausencia de hormonas" en los pollos en su país "es
comprobada por constantes inspecciones de mercados, que son los más
exigentes del mundo". EFE