Berlín, 26 ago (EFE).- La canciller de Alemania, Angela Merkel,
advirtió hoy a los consorcios energéticos alemanes de que, además de
un impuesto sobre la prolongación de la vida de las centrales
nucleares, el Gobierno alemán se plantea exigirles una aportación
extra destinada a las energías renovables.
Con motivo de una visita a la central nuclear de Linge, en el
estado norteño de la Baja Sajonia, Merkel declaró que prefiere no
usar la palabra "tasa" para esta contribución añadida para los
consorcios energéticos.
"Claro está, debatiremos la forma en que la industria energética
haga sus aportaciones a las energías renovables", afirmó la
canciller tras subrayar que el Gobierno busca consolidar su
presupuesto.
La visita a la central de Linge se encuadra en una gira que
Merkel realiza actualmente por Alemania para conocer las necesidades
y el funcionamiento de la red energética del país.
En Linge, la canciller se reunió con el presidente del consorcio
energético RWE, Jürgten Großmann, y el máximo responsable de su
competidor Eon, Johannes Teyssen.
"Hemos mantenido una breve conversación sobre este tema y más
adelante seguiremos con ella", aseguró la canciller, quien aclaró
que no se había tratado de una "negociación".
Por su parte, Teyssen declaró que "tuvimos muy pocos minutos con
ella y la hemos asesorado en su gira".
El Gobierno prepara su nuevo concepto energético que deberá
presentar a finales de septiembre, en medio del debate sobre la
prolongación de la vida de las centrales nucleares a cambio de
nuevos impuestos a las empresas energéticas para garantizar el
suministro de energía.
Docenas de manifestantes con numerosos tractores recibieron hoy a
Merkel a la entrada de la central de Lingen cuando se disponía a
visitarlo acompañada por su ministro de Medio Ambiente, Norbert
Röttgen, y Grossmann.
La policía local señaló que ya antes de la llegada de Merkel un
grupo de activistas de la organización ecologista Greenpeace
consiguió proyectar en enormes letras sobre la torre de
refrigeración de la planta nuclear el mensaje: "La energía nuclear
es la vía errónea, señora Merkel".
La visita a Lingen es la cuarta etapa de la gira que Merkel
realiza por Alemania para conocer la realidad energética del país
con vistas al nuevo concepto sobre la combinación de las distintas
energías que su gobierno quiere aprobar a finales de setiembre.
A lo largo de la jornada, Merkel visitará también una moderna
planta térmica de gas en el mismo lugar, una central bioenergética
en Emsbüren y una planta térmica de carbón en la localidad de Lünen,
en el estado federado de Renania del Norte-Westfalia.
Mientras tanto, el ministro alemán de Economía, el liberal Rainer
Brüderle, ha expresado su rechazo a la iniciativa de sus socios
cristianodemócratas de gravar a las empresas propietarias de plantas
nucleares con un impuesto suplementario a la ya prevista tasa que se
aplicará al combustible nuclear.
"No deberíamos dar el segundo paso antes de haber hecho el
primero", afirma Brüderle en declaraciones que publica hoy el
rotativo "Bild", quien advirtió de que "la energía no debe
convertirse en un producto de lujo".
Por su parte, su colega de Medio Ambiente, el cristianodemócrata
Norbert Röttgen, señaló anoche en declaraciones televisivas que los
ingresos por la nueva tasa al combustible nuclear serán usados para
consolidar los presupuestos alemanes y reducir la deuda, pero
también para sanear el depósito de residuos atómicos de Assen.EFE