Fernando Puchol
Londres, 10 nov (EFE).- Los responsables de Turismo de más de un
centenar de países coincidieron hoy en señalar que la salida de la
crisis en el sector tiene dos vectores -el económico y el ecológico-
y que hay que aprovechar la oportunidad para renovar la industria.
Esta fue la principal conclusión de la mini-cumbre de ministros y
secretarios de Estado de Turismo celebrada en el marco del World
Travel Market (WTM), la feria internacional de Londres, bajo los
auspicios de la Organización Mundial del Turismo (OMT).
La cita estuvo precedida por los datos de la OMT, organismo
perteneciente a Naciones Unidas, que indican que la caía del turismo
fue del 7 por ciento entre enero y septiembre de 2009 con respecto
al mismo periodo del año anterior -de 643 millones de turistas se
pasó a 600-, pero que apuntan a un leve repunte desde agosto.
"Si en marzo llegó a caerse a un ritmo del 11 por ciento con
respecto al mismo mes del año anterior, en agosto ese descenso fue
del 3 por ciento", destacó el secretario general de la OMT, Taleb
Rifai, al informar sobre el contenido de la reunión de ministros.
"Cerraremos 2009 con una media de entre el 5 y el 6 por ciento
negativo", señaló Rifai, quien añadió que "en algún momento de 2010
se verán las tendencias positivas", aunque advirtió de que "las
cosas siguen siendo muy inciertas y la situación muy frágil".
En cuanto a 2010, cifró entre el 1 y el 3 por ciento el
crecimiento previsto, con la excepción positiva de los países
emergentes, "que llegarán a crecer en torno a un 5 por ciento".
Rifai explicó que los responsables políticos trabajan a partir de
las proyecciones que apuntan a una recuperación "modesta" en 2010, y
pidió una mayor implicación de los gobiernos para que las políticas
relacionadas con el turismo sean consideradas "de Estado".
El máximo responsable de la OMT subrayó que si los gobiernos
entienden que el enfoque económico y el enfoque ecológico para
ayudar a esta industria son el mismo, "la solución también se verá
como una sola", y consideró que "el único camino de futuro es la
transformación de la economía en una economía ecológica".
Rifai pidió a los responsables políticos que "mantengan con
claridad y decisión los paquetes de estímulo económico" para
apuntalar una naciente recuperación, que viene avalada por el
aumento de la confianza general de los consumidores.
Puso como ejemplo el liderazgo del presidente de Brasil, Luiz
Inacio Lula da Silva, y del presidente del Gobierno español, José
Luis Rodríguez Zapatero, para situar el turismo en la agenda de
preferencias y expresó su deseo de que reunir a los ministros de
Turismo del G-20 sea pronto una realidad con efectos concretos.
Los ministros cerraron filas también en contra a la imposición de
nuevos impuestos que gravan el turismo, como la tasa aeroportuaria
que existe en el Reino Unido (país que no está en la OMT), y
pidieron crear "una atmósfera que no cree aún más problemas", en
palabras del portavoz de la Organización, Geoffrey Lipman.
"Un impuesto de este tipo es una tasa contra el desarrollo,
maquillada como una contribución para luchar contra el cambio
climático", argumentó Lipman, quien incidió asimismo en la
importancia que el turismo tiene en la creación de empleo.
Sobre el cambio climático, hubo coincidencia plena en que buscar
soluciones es urgente e imprescindible, con llamamientos dramáticos
de los ministros de los países caribeños o de archipiélagos como las
Maldivas, cuya supervivencia está en juego por la subida del nivel
de los océanos a causa del cambio climático.
El turismo sólo produce el 5 por ciento de las emisiones de
dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera, recordó Lipman, quien
también pidió que no se señale a la aviación comercial como una de
las grandes responsables de la contaminación atmosférica.
El consenso alcanzado fue, según Lipman, que "la aviación tiene
que cambiar, pero como todo lo demás, y que no tiene que ser
señalada como culpable, sobre todo teniendo en cuenta que de esta
industria depende en buena parte el futuro del turismo".
Sobre la gripe A, otro de los elementos que golpearon con dureza
a la industria en 2009, Rifai advirtió de que "lo peor no ha pasado"
y pidió "permanecer muy atentos", aunque se haya constatado que
viajar "no propaga el mal, que está extendido globalmente". EFE