Londres, 28 nov (EFE).- El nombramiento de Michel Barnier como
nuevo comisario del Mercado Interno de la Unión Europea preocupa en
círculos de la City, donde recelan un complot francés para socavar
el capitalismo anglosajón.
Un funcionario británico citado por el Financial Times calificó
el proceso de elección de los nuevos comisarios como algo "feo", que
demuestra que "si eres un país grande y comienzas pronto a presionar
con fuerza, al final consigues lo que quieres".
Un banquero de la City declaró al diario "The Times": "Lo
ocurrido es un desastre. Han nombrado a un proteccionista de la
línea dura. No le importa nada el Reino Unido. Se trata de un puesto
que es clave para Gran Bretaña, para la City y se lo queda un
francés".
La única concesión a Londres, explica el periódico, fue un
acuerdo de última hora según el cual un funcionario británico,
Jonathan Faull, será director general del departamento de mercado
interno, a las órdenes de Barnier.
Según Michael Fallon, un diputado conservador del Comité Selecto
del Tesoro en la Cámara de los Comunes, "han engañado al primer
ministro, Gordon Brown. Nos hemos quedado sin ninguno de los puestos
económicos claves en Bruselas".
"Y todo esto ocurre, añade Fallon, en un momento terriblemente
peligroso en el que se han presentado propuestas firmes para regular
las finanzas, los seguros, capitales privados y los fondos de alto
riesgo".
Para el responsable de Asuntos Exteriores de los "tories",
William Hague, "los servicios financieros son un interés económico
vital del Reino Unido".
"Queremos coordinar internacionalmente su regulación, pero las
propuestas de la Comisión Europea pueden hacer un daño increíble a
nuestra industria de servicios financieros", afirma Hague, citado
por "The Times". EFE