Buenos Aires, 5 nov (EFE).- Una nueva huelga por conflictos
sindicales paralizó hoy las seis líneas del metro de Buenos Aires,
que a diario trasladan a cerca de un millón de pasajeros, con la
consiguiente congestión del tránsito en la capital argentina.
La protesta responde al "plan de lucha" que llevan a cabo los
trabajadores del metro para escindirse del sindicato de conductores
de autobuses y crear su propio gremio, asunto que se discute desde
hace catorce meses en el Ministerio de Trabajo.
El servicio del metro quedó paralizado en medio de griteríos y
forcejeos entre miembros de ambos grupos sindicales antagónicos en
la estación de Constitución, en el sur de la ciudad, una de las de
mayor afluencia de pasajeros.
Metrovías, que además del metro opera una línea del ferrocarril
suburbano, intentó establecer, sin éxito, un servicio de emergencia
en medio de tensiones entre los grupos sindicales enfrentados.
"Es el séptimo paro que llevan a cabo en las últimas dos
semanas", destacó Lucila Maldonado, portavoz de Metrovías, al
subrayar que la empresa no es responsable de los perjuicios que
sufren los pasajeros.
Las radios y canales de televisión de Buenos Aires se colmaron de
llamadas de pasajeros indignados por la paralización del metro, que
se suma a otras movilizaciones de protesta que bloquean accesos a la
capital argentina, como sucede casi a diario en los últimos años.
Néstor Segovia, uno de los delegados de los huelguistas, subrayó
que los trabajadores del metro "se fueron con las manos vacías" de
la reunión de esta semana con las autoridades del Ministerio de
Trabajo, que habían prometido una solución al conflicto.
"No tenemos nada que ver con los conductores de autobuses, no se
trata de reclamaciones salariales, nuestro objetivo es que nos
concedan la personalidad jurídica como sindicato de trabajadores del
metro", remarcó a periodistas. EFE