Londres, 11 ene (EFE).- Un grupo de oligarcas rusos prepara
nuevas salidas a bolsa en Londres, señal de que la City sigue siendo
atractiva para los magnates de ese país que tratan de reconstruir
sus fortunas tras la última crisis, que golpeó con fuerza al sector
de las materias primas.
Serguei Popov y Andrei Melnichenko, propietarios de Suek, el
mayor productor de carbón ruso, nombrará esta semana a sus asesores
bancarios para una salida a bolsa que podría valorar su negocio en
el equivalente de 9.000 millones de dólares, informa hoy el diario
británico "Financial Times".
Una persona conocedora de las negociaciones dijo al periódico que
Popov y Melnichenko querían sacar a bolsa aproximadamente un 25 por
ciento de la compañía y que se había pensado provisionalmente en
pedir asesoramiento al banco ruso VTB y al Citigroup aunque se
piensa también en otros bancos como Merrill Lynch, Bank of America,
Morgan Stanley, UBS o Credit Suisse.
A su vez, ProfMedia, uno de los mayores grupos rusos del sector
de los medios de comunicación, que tiene al frente a Vladimir
Potanin, ha encargado a los bancos Credit Suisse, Bank of Americva y
Merrill Lynch que preparen también su salida a bolsa, que podría
representar un valor de mercado de 2.000 millones de dólares.
Según el Financial Times, que cita a fuentes próximas a ambos
grupos, las correspondientes salidas podrían producirse durante el
segundo semestre del año en curso.
En el sector financiero de la capital se interpreta ese interés
de los grupos rusos por Londres como una confirmación de que la City
no ha perdido atractivo como centro financiero para los magnates
rusos pese a que la elección de Hongkong para la flotación de Rusal,
el gigante del sector del aluminio propiedad de Oleg Deripaska.
Tras meses de negociaciones, la Bolsa de Hongkong aprobó con
condiciones en diciembre la salida a bolsa de Rusal aunque los
reguladores han impuesto una serie de condiciones a la participación
de los inversores privados.
"La experiencia de Deripaska ha sido un aviso para las compañías
rusas que pensaban en salidas a bolsa en lugares distintos de
Londres", declaró al periódico Chris Weafer, jefe de estrategia de
la empresa UralSib.
El colapso de las acciones y de los precios de las materias
primas en el 2008 asestó un fuerte golpe a las fortunas personales
de muchos magnates rusos.
Así, según la revista Forbes, Potanin vio reducido el valor de
sus activos de 19.300 millones de dólares en 2008 a sólo 2.100
millones al año siguiente.
A su vez, la fortuna de Popov pasó de 6.400 millones de dólares a
2.400 millones en el mismo período de tiempo mientras que la de
Melnichenko quedó reducida de 6.200 a 1.000 millones de dólares. EFE