Tokio, 2 jun (EFE).- El ministro de Comercio Exterior de Perú,
Martín Pérez, aseguró hoy en entrevista con Efe que la negociación
para un Tratado de Libre Comercio (TLC) con Japón está en su fase
final y apostó por salvar pronto las diferencias existentes.
Pérez indicó que el Acuerdo de Asociación Económica con Japón,
equivalente a un TLC, podría cerrarse en noviembre, coincidiendo con
la reunión de jefes de Estado y Gobierno del Foro de Cooperación
Asia-Pacífico (APEC) en Yokohama (centro de Japón), a la que
asistirá el presidente peruano, Alan García.
El titular peruano de Comercio Exterior, que se encuentra en
Tokio en visita oficial, matizó no obstante que "lo importante no es
cuándo se cierra la negociación, sino cómo", ya que en su opinión el
acuerdo debe "mirar hacia el futuro e incluir productos peruanos con
potencial".
Según Pérez, aún se deben limar algunas diferencias relativas a
productos pesqueros peruanos y algunos agrícolas, como el ajo y la
cebolla.
El ministro añadió que también se está negociando la inclusión
del zinc en el acuerdo por la importancia de este recurso minero en
Perú.
Martín Pérez aludió por otra parte a la dimisión hoy del primer
ministro nipón, Yukio Hatoyama, al señalar que "se debe ver qué
sucederá respecto a la situación política complicada en Japón".
Esta previsto que la Dieta (Parlamento) vote el lunes al sucesor
de Hatoyama, que ha permanecido poco más de ocho meses en el poder.
Pérez llegó ayer, martes, a Tokio, desde donde viajará a Sapporo
(norte de Japón) para participar en la reunión de ministros de
Comercio de la APEC, que se celebrará los días 5 y 6 de junio.
En Sapporo, Pérez aprovechará para reunirse con los
representantes de Corea del Sur y discutir el avance de las
negociaciones, ya en marcha, sobre su TLC.
El ministro opinó que la firma de un TLC con Corea del Sur está
más cercana que con Japón, ya que "hay menos temas pendientes".
En el marco del encuentro de la APEC, Perú pedirá medidas para
luchar contra el proteccionismo y planteará acciones para evitar
desequilibrios en las barreras no arancelarias entre países, como la
homologación de los procesos de certificación sanitaria. EFE