Lima, 1 sep (EFE).- El presidente de Perú, Alan García, promulgó
hoy el Código de Protección y Defensa del Consumidor, una normativa
que, según el mandatario, protegerá a los ciudadanos de abusos en la
prestación de bienes y servicios.
De este modo, la norma, que fue aprobada por el Congreso peruano
el pasado 12 de agosto, queda lista para ser publicada en el diario
oficial, tras un largo proceso de debates y modificaciones.
Durante la ceremonia de promulgación, García señaló que la nueva
norma incorpora conceptos importantes para el camino hacia la
democratización del país.
"Democratizar es tender a la equidad, que no significa igualdad,
sino igualdad de oportunidades, y en este caso la igualdad de
información", manifestó el mandatario.
El nuevo código "establece las normas de protección y defensa de
los consumidores, instituyendo como un principio rector de la
política social y económica del Estado la protección de los
consumidores", según el texto de 102 folios que fue aprobado por el
Congreso.
El código considera como "cláusulas abusivas" en contratos a
aquellas que facultan al proveedor a suspender o resolver
unilateralmente estos documentos sin que se comunique previamente o
sin un plazo de antelación razonable.
La normativa, que establece sanciones en caso de incumplimiento
por parte del proveedor, también obliga a los proveedores de
servicios públicos a garantizar su continuidad y compensar a los
usuarios en caso de que exista un desabastecimiento o interrupción
de sus servicios.
García también destacó que el código prohíbe la publicidad
engañosa a la que recurren los comercios con el objetivo de
"enganchar" a los consumidores, ofreciendo bienes o servicios que
finalmente no son incluidos.
"Todas estas son formas discriminatorias que en una sociedad
moderna no se pueden permitir", afirmó el presidente peruano.
A partir de que el nuevo código entre en vigor, todos los locales
públicos y privados deberán contar con un "libro de reclamaciones",
en el que los consumidores podrán dejar constancia de los problemas
que encuentren.
Aunque el texto final fue aprobado por una amplia mayoría en el
Congreso, lo que hizo que no fuera necesaria una segunda votación,
durante el proceso de redacción han sido varias las críticas
recibidas, tanto de los empresarios como de las mismas asociaciones
de consumidores.
Así, mientras unos señalan que la legislación vigente era
suficiente y lo que fallaba era la aplicación de la misma, los
grupos de defensa del consumidor critican que el nuevo código se
centre en la información que recibe el consumidor, en vez de
protegerlo de un modo más eficaz. EFE