Quito, 13 jul (EFE).- El presidente de Ecuador, Rafael Correa,
anunció hoy que la constructora brasileña Odebrecht, expulsada por
él en septiembre de 2008, podrá volver a operar en el país después
de que se hayan solucionado, de mutuo acuerdo, las controversias que
mantenía el Gobierno con la compañía.
Durante un recorrido de obras por el centro andino del país, el
mandatario declaró a periodistas que el acuerdo supone "una derrota
total de Odebrecht y una victoria total del país", porque la
brasileña "ha reconocido todas las incidencias, condicionamientos" y
pagos que exigió Ecuador.
En septiembre de 2008, Correa ordenó la expulsión del país de la
constructora tras no llegar a un acuerdo para la reparación de la
planta hidroeléctrica San Francisco, que construía en un sector de
las estribaciones centrales andinas hacia la Amazonía, y que
presentó problemas estructurales.
La ejecución de esa obra, adjudicada a Odebrecht en 2007, se
financió con un crédito de 286,8 millones de dólares otorgado por el
Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de Brasil,
que Ecuador impugnó por presuntas irregularidades en su
contratación.
En noviembre de ese mismo año, Ecuador presentó una demanda de
arbitraje internacional para analizar el pago del crédito, lo que
también permitió que, en enero de 2009, se solucionara un conflicto
diplomático con Brasil, que había llamado a consultas a su embajador
en Quito por el caso Odebrecht.
Tras la salida del país de la constructora, el consorcio
ecuatoriano Hidropastaza se hizo cargo de la central hidroeléctrica,
que tuvo que paralizar en ocasiones su operación por los fallos que
presentaba.
Según se informó oficialmente en días pasados, a través del
acuerdo alcanzado, Odebrecht se ha comprometido a realizar las
inversiones necesarias para asegurar el funcionamiento pleno y a
largo plazo de la central hidroeléctrica San Francisco.
Además, la constructora también efectuará las obras necesarias
para el funcionamiento de la central, garantizará por 5 años la
reparación de las obras civiles y realizará un pago transaccional
por las paralizaciones de la central, entre otros.
Odebrecht también suministrará soporte técnico y capacitación de
los técnicos de Hidropastaza, para la operación y mantenimiento de
la central San Francisco por el plazo de 30 meses. EFE