Cancún (México), 2 mar (EFE).- El presidente de México, Felipe
Calderón, inauguró hoy 14 kilómetros de playas en Cancún, Playa del
Carmen y Cozumel, que fueron recuperados por las autoridades tras
haber sido arrasados por varios huracanes, con el objetivo de
"reconstituir" la imagen de esos destinos turísticos.
En una ceremonia realizada en la zona hotelera de Cancún, donde
se vertieron parte de los 5,2 millones de metros cúbicos de arena
que se usaron para rellenar las playas, Calderón indicó que las
obran permitirán "reconstituir la imagen que tenían estos centros
vacacionales antes de los desastres naturales que tanto han
impactado a la región".
El paso de varios huracanes por esta región mexicana, principal
destino turístico del país, redujo el ancho de la playa al punto de
que varios hoteles perdieron completamente sus franjas de arena y el
mar amenazaba las estructuras de algunos inmuebles.
Esa zona de México "vio cómo se reducían y se cancelaban viajes
de visitantes, tanto nacionales como extranjeros", sobre todo tras
el paso del huracán "Wilma" en 2005, el cual "afectó prácticamente
el 90% de las playas", agregó el mandatario.
La situación turística de la Riviera Maya y Cancún empeoró en
2009 tras la epidemia de gripe A que tuvo a México en el foco de
atención, en la medida en la que fue el primer país del mundo que
declaró la alerta sanitaria por el virus.
Como ejemplo de la recuperación turística de la zona, Calderón se
refirió a la cumbre del Grupo de Río celebrada la semana pasada en
Playa del Carmen y a importantes reuniones que se llevarán a cabo en
Cancún este año, como la asamblea anual del Banco Interamericano de
Desarrollo (BID), el Foro Internacional de Energía y la Conferencia
de Naciones Unidas sobre Cambio Climático.
Mientras que durante la epidemia del virus AH1N1 la ocupación
hotelera en Cancún se situó en el 24%, en diciembre pasado llegó a
70%, y la semana pasada se ubicó en 93%, precisó Calderón.
El mandatario destacó que su Gobierno impulsará el turismo en
México mediante la construcción de dos nuevos aeropuertos, la
ampliación de otros 26, entre ellos el de Cancún, y la construcción
de autopistas para hacer más accesibles los destinos vacacionales.
Las obras inauguradas hoy, en las que se invirtieron alrededor de
1.000 millones de pesos (78,7 millones de dólares), fueron
criticadas duramente por grupos ecologistas como Greenpeace y Gema,
que argumentaron que ponían en riesgo el hábitat de especies
protegidas como la tortuga marina, el caracol rosado y los arrecifes
de coral. EFE
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