Berlín, 10 jun (EFE).- Los presidentes de los cuatro estados
federados alemanes con plantas de Opel han criticado la decisión del
ministro alemán de Economía, Rainer Brüderle, de no conceder las
ayudas públicas a Opel solicitadas por General Motors, horas antes
de su encuentro con la canciller, Angela Merkel.
"No es digno del Gobierno federal" convocar para hoy una reunión
con la canciller cuando el ministerio de Economía ya ha tomado una
decisión definitiva, dijo hoy en declaraciones a la emisora pública
Deutschlandfunk el presidente de Renania-Palatinado, Kurt Beck.
"Decenas de miles de trabajadores de Opel y las empresas de
suministros temen desde hace mas de un año por sus puestos de
trabajo. Resulta inaceptable la partida de póker que se juega en el
seno del Gobierno federal", añadió Beck.
El político socialdemócrata criticó así las abiertas diferencias
entre Brüderle y Merkel, ya que, después de que el primero anunciara
que no habrá ayudas públicas para Opel, la segunda convocaba a los
cuatro presidentes de los Länder afectados para buscar alternativas
para el rescate de Opel.
Al igual que sus colegas de los otros tres estados afectados
-Renania del Norte-Westfalia, Hesse y Turingia- Beck reiteró hoy la
disposición de su Gobierno de hacer una aportación para el rescate
de la empresa automovilística europea.
Beck señaló que espera en la cita de esta tarde una propuesta
para garantizar los puestos de trabajo en Opel por parte de la
canciller, que ayer afirmó que aún no se había dicho la última
palabra sobre Opel.
Para explicar su negativa a la concesión de las ayudas
solicitadas por General Motors, Brüderle afirmó que el consorcio
estadounidense dispone de por lo menos 10.000 millones de euros de
liquidez y puede sanear Opel por sus propios medios.
Además, la ayuda solicitada por Opel debía salir de un fondo
especial para empresas afectadas por la crisis financiera y el
ministro considera que los problemas del fabricante de automóviles
tiene un origen distinto.
El Comité de Empresa y la dirección de Opel criticaron la
decisión de Brüderle y acusaron al ministro de actuar contra el
mantenimiento de las plantas de Opel en Alemania.
El consejero delegado de Opel, Nick Reilly, afirmó que la matriz
General Motors está muy "decepcionada" por la decisión del Gobierno
de negarle las ayudas solicitadas, mostró su sorpresa y consideró
que "la decisión es difícil de entender" después de un largo proceso
de negociación.
El consejero delegado de Opel aseguró, asimismo, que los Estados
federados con plantas de Opel, estaban dispuestos a proporcionar las
ayudas públicas.
Por su parte, el presidente del Comité de Empresa, Klaus Franz,
dijo que GM, pese a haber hecho progresos en su saneamiento, todavía
no ha superado su crisis.
Ahora, la esperanza de los trabajadores de Opel es que se
encuentre una fórmula para que los Estados federados donde hay
plantas puedan ofrecer ayudas, para lo que la reunión que se celebra
esta tarde podría ser decisiva. EFE