Quito, 5 nov (EFE).- El nuevo reglamento minero de Ecuador, que
entre otras cosas establece que el 50 por ciento de las regalías o
dividendos que dejen los proyectos mineros es para el Estado, es "un
punto de inflexión para desarrollar una minería responsable",
señalaron hoy fuentes oficiales.
En declaraciones a Radio Sonorama, el ministro de Recursos
Naturales No Renovables de Ecuador, Germánico Pinto, habló de los
decretos presidenciales dictados ayer por los que se aprueba el
reglamento minero que completa la ley aprobada en enero de 2009, muy
criticada por indígenas y ecologistas.
Frente a esas críticas, basadas en supuestos peligros para el
medio ambiente y las comunidades indígenas, Pinto admitió que hay
aspectos de la ley que podrían "mejorarse" y al respecto subrayó que
el Gobierno está "absolutamente abierto" al diálogo.
No obstante, subrayó que los reglamentos suscritos ayer por el
presidente Rafael Correa "precisan mucho más las bondades de la ley
respecto al manejo, control del Estado y supervisión de los
ciudadanos" sobre los proyectos mineros.
Además del Reglamento General a la Ley de Minería, Correa también
suscribió un Reglamento especial de Fomento a la Pequeña Minería y
Minería Artesanal y un Reglamento Ambiental para las Operaciones,
así como varios documentos que permiten la constitución de la
Empresa Nacional Minera.
También decretó la creación de otras agencias de regulación y
control y un Instituto de Investigación geológica, minera y
metalúrgica.
La ley minera establece, entre otros aspectos, que sólo el Estado
puede delegar la explotación de minerales a empresas trasnacionales
y que el 50 por ciento de las regalías o dividendos que dejen los
proyectos mineros vaya a parar a manos del Estado.
Además, con la nueva normativa, las compañías mineras, antes de
iniciar la actividad extractiva, tendrán que presentar estudios
técnicos y ambientales completos y usar tecnología de punta y
limpia.
Según el ministro Pinto, "en la medida" en que se apliquen los
reglamentos "se van a corregir problemas serios de la minería en
Ecuador" como la contaminación ambiental, la falta de control y de
capacitación y el seguimiento del Estado sobre los proyectos
extractivos.
Puntualizó que "no sólo va a corregir, sino a dar vuelta a la
página: es un punto de inflexión para poder desarrollar una minería
responsable" en términos ambientales y sociales, añadió.
Pinto negó que el Estado ya haya dado el visto bueno a empresas
internacionales mineras para realizar proyectos de explotación y
detalló que, por el momento, se lleva a cabo "sólo una exploración
avanzada".
"Lo que hemos hecho mediante el mandato minero es verificar que
el conjunto de las empresas cumplan con la ley y las disposiciones
legales", señaló y añadió que tras eso, el Estado "tendrá la
capacidad de analizar a fondo la pertinencia o no de la realización
de un proyecto". EFE