Fráncfort (Alemania), 15 sep (EFE).- El presidente del Grupo
Renault, Carlos Ghosn, expuso hoy la posición de la marca
automovilística francesa como productor y comercializador a gran
escala de vehículos eléctricos.
Ghosn, en la rueda de prensa del Salón del Automóvil de Fráncfort
apuntó los años 2012 y 2013 como el inicio de esa política de la
marca circunscrita a la apuesta abierta por los vehículos de
emisiones cero.
Un primer paso se ha dado en esta muestra alemana, en la que la
marca del rombo ha presentado cuatro creaciones de coches eléctricos
"con la voluntad de venderlos a todo tipo de clientes" y establecer
como estrategia para este nuevo producto los factores de confort,
espacio, seguridad y prestaciones.
Renault aborda el reto del coche eléctrico con dos derivaciones
de modelos tradicionales, el Kangoo y el presentado hoy en
Fráncfort, el Fluence, además de dos prototipos como el Twizy, un
radical urbano de dimensiones contenidas, y el Zoe, una berlina de
cuatro metros con capacidad para cuatro pasajeros.
De estos cuatro modelos, uno de los cuales aspira a producirlo la
planta de montaje de Valladolid, tres admiten recarga a través de la
red durante ocho horas, mientras que el pequeño Twizy necesitaría
sólo cuatro.
La marca del rombo establece para esta serie de partida de
eléctricos otras dos modalidades de carga, por medio de los postes
urbanos, o bien, con el cambio directo de baterías.
Las velocidades máximas medias se fijan en 100 km/h para el
Twizy, mientras que el trío restante puede alcanzar 160 km/h.
Los planes de Renault establecen una comercialización en 2011 del
Kangoo, del Fluence y del Twizy, y para 2013, del Zoe.
Ghosn reveló que ya trabajan 2.000 empleados de Renault en el
desarrollo de la gama de eléctricos y pidió a las administraciones
públicas que agilicen al máximo el desarrollo de infraestructuras
propia para hacer frente a este reto. EFE