Londres, 11 feb (EFE).- Rolls-Royce tuvo un beneficio de 915
millones de libras (1.038 millones de euros) en 2009, lo que supone
un incremento del 4 por ciento frente a 2008, a pesar de la
coyuntura económica adversa y de los retrasos en la mayoría de los
programas de aviación.
Este aumento del beneficio por sus actividades continuadas, que
supera los 868 millones de libras (985 millones de euros) que
preveían los analistas, se debe al éxito en la captación de nuevos
clientes y al esfuerzo por contener los costes, según el informe
remitido hoy por la compañía a la Bolsa de Londres.
La facturación del segundo mayor fabricante de motores del mundo
durante el pasado año sumó 10.400 millones de libras (11.800
millones de euros), el 14 por ciento más que en 2008, cifra que la
empresa confía en mantener en 2010 pese a las condiciones del
mercado todavía complicadas.
El director ejecutivo de la compañía, Sir John Rose, cree que
estas cifras son "sólidas" y demuestran la "resistencia de su
negocio".
La cartera de pedidos de la empresa británica sumaba 58.300
millones de libras (66.000 millones de euros) al final de año, y de
ellos 13.400 millones de libras (15.200 millones de euros)
correspondían a nuevos clientes.
La división de la compañía que más ingresó fue la de espacio
aéreo civil (fabricación de motores), con un total de 47.000
millones de libras (53.320 millones de euros), de las que 9.400
millones (10.600 millones de euros) procedieron de pedidos
recientes.
Sin embargo, la compañía señaló que las volátiles condiciones de
mercado y los retrasos hicieron mella en el resultado.
Las ventas en el resto de divisiones de la empresa continuaron
creciendo durante 2009, cuando registraron un considerable aumento
del 56 por ciento, impulsado por las subidas del 19 y del 17 por
ciento en defensa y en el sector marino, respectivamente. EFE