Bruselas, 16 dic (EFE).- Las negociaciones entre las sociedades
de autores y la industria europea sobre la armonización del canon
digital en la UE se han roto hoy sin lograr ningún acuerdo, según
Digital Europe, la asociación de fabricantes europeos de aparatos
electrónicas.
Las discusiones comenzaron en julio de 2008 a iniciativa de la
Comisión Europea (CE), con vistas a que los representantes
empresariales y las entidades de recaudación de derechos de autor se
pusieran de acuerdo a nivel comunitario sobre la aplicación del
gravamen a los nuevos aparatos.
El canon digital es un recargo en el precio de compra de los
dispositivos de grabación y reproducción digital -como grabadoras de
discos compactos y aparatos MP3- y de los medios de grabación
-soportes vírgenes- para compensar a los artistas y propietarios de
los derechos de autor por la copia privada de sus creaciones.
Actualmente esta medida se aplica de forma diferente en los
distintos estados miembros, y no existe ninguna directriz europea
que regule qué tipo de productos se deben gravar.
La asociación de fabricantes europeos de aparatos electrónicos se
ha mostrado "muy decepcionada" por la ruptura de las negociaciones,
y ha afirmado que se trata de un resultado "desafortunado" para
todos los interesados y, en especial, para los consumidores, "que
son quienes pagan el canon digital en último término".
Digital Europe apoya que los artistas y creadores "sean
compensados de forma justa por su trabajo de creación", pero señala
que los principios que están detrás del llamado canon digital
"fueron desarrollados en los años 60" y no son aplicables en la
actualidad, según dijo en un comunicado su directora general,
Bridget Cosgrave.
A su juicio, las tasas sobre los ordenadores, grabadoras de DVD,
escáneres reproductores MP3 y teléfonos móviles son "impuestas de
forma arbitraria" para compensar a los creadores "por copias
privadas que los consumidores pueden realizar de forma legal".
Este sistema "impide el desarrollo de nuevos modelos de negocio"
adaptados a internet.
Un reproductor MP3 paga tasas que van desde los 25 euros en
francia hasta los 3,95 euros en España, mientras que el canon para
las impresoras con funciones de fax, escáner y copia oscila entre
los 18 euros en Bélgica y los 7,95 euros en España, según la
asociación.
Digital Europe reclama "transparencia" y "certidumbre jurídica" a
nivel comunitario, de acuerdo con los principios del mercado común.
EFE