Berlín, 15 sep (EFE).- El ministro español de Industria, Miguel
Sebastián, criticó hoy en Berlín la escasa información facilitada
por el fabricante Magna en relación con la operación de compra de
Opel y aseguró que "cuanto más la conocemos, menos nos gusta".
"Falta ahora mismo información por parte de Magna. Ha habido una
decisión que nos ha parecido sorprendente, porque General Motors
nunca vio la opción de Magna como la mejor opción", dijo Sebastián
antes de reunirse en el ministerio de Economía alemán con
representantes de todos los países europeos con planta de Opel.
Sebastián subrayó que el Gobierno español y el aragonés todavía
no conocen "los detalles del acuerdo ni de la opción industrial de
Magna", pero añadió que "cuanto más conocemos la opción de Magna,
menos nos gusta".
El ministro aseguró que General Motors "en todas su
manifestaciones públicas como privadas no veía a Magna como la mejor
opción" y que por eso hay que averiguar qué ha llevado a un cambio
de opinión tan "brusco y repentino".
La reunión tiene como objetivo hablar del reparto de las ayudas a
"New Opel", la compañía que surgirá de la venta al consorcio formado
por el fabricante austro-canadiense Magna y el banco ruso Sberbank.
Las críticas se dirigieron también indirectamente contra el
gobierno de Angela Merkel, pues la reunión ha sido convocada
oficialmente para hablar sobre las ayudas financieras que cada país
aportara a "New Opel", y no sobre el plan en sí.
"Cuando uno va a un restaurante primero mira el menú, luego come
y luego paga la factura. Hoy nos han convocado para pagar la factura
y todavía no hemos visto el menú", dijo el ministro ante
periodistas.
Sebastián hizo hincapié en que España confía en que Opel tiene un
"futuro brillante", pero únicamente si todos los implicados trabajan
juntos en la solución de los problemas.
Aseguró que su Gobierno pedirá a la Comisión Europea que "esté
vigilante" sobre el proceso de compra e insistió en que "nosotros
también lo estaremos".
"Todo tiene arreglo si se presenta un plan que sea viable a largo
plazo y que esté basado en condiciones económicas e industriales a
largo plazo esto va a ganar el apoyo de gobierno de España y el
gobierno de Aragón", explicó.
Alemania se ha comprometido a facilitar ayudas por un total de
4.500 millones de euros, entre créditos y avales.
El acuerdo anunciado la semana pasada por General Motors que la
casa matriz estadounidense mantenga el 35 por ciento de las
acciones, ceda el 55 al citado consorcio y el diez a la plantilla.
La reunión se produce en un momento de tensión de los países
europeos con plantas - España, Bélgica, Reino Unido y Polonia- por
considerar que la operación con Magna beneficia demasiado los
intereses alemanes.
A ello se añade el escepticismo de que entrar en un negocio con
Rusia no sólo pueda constituir un traspaso de tecnología sino
también una continua inyección de fondos. EFE