(Actualiza con declaraciones posteriores de Miguel Sebastián a
los medios de comunicación)
Madrid, 16 feb (EFE).- El ministro de Industria, Miguel
Sebastián, vinculó hoy los "posibles apoyos" a General Motors (GM) a
la puesta en marcha de un plan industrial "basado en criterios
industriales y de competitividad" que permita el mantenimiento del
máximo empleo posible en la planta de Figueruelas (Zaragoza).
Sebastián, quien compareció ante la Comisión de Industria,
Turismo y Comercio del Senado, subrayó que el Gobierno sigue
trabajando junto con las autoridades de Aragón para "hacer valer la
alta competitividad" de la planta española, que emplea a unos 7.000
trabajadores y produce los modelos Opel Corsa, el derivado comercial
Combo y el monovolumen Meriva.
El ministro explicó que la decisión de la matriz estadounidense
del grupo automovilístico de mantener la propiedad de su filial
europea Opel, y no venderla al fabricante de componentes Magna, "no
ha cambiado la postura" del Ejecutivo español.
Así, "al igual que se hizo anteriormente en las negociaciones con
Magna", el Gobierno condicionará los "posibles apoyos" a GM a la
puesta en marcha de un plan basado en criterios industriales y de
competitividad que cuente con el respaldo de la plantilla de
Figueruelas, y que permita "el mayor mantenimiento posible de
puestos de trabajo".
Sebastián recordó que el futuro de Figueruelas depende de una
"decisión de una empresa privada" y que cualquier iniciativa del
Gobierno tiene que estar sujeta a la normativa europea.
El ministro dijo que "todos somos conscientes de que tiene que
haber un ajuste, un sacrificio", porque el grupo automovilístico
tiene un "exceso de capacidad".
No obstante, este ajuste "tiene que recaer en las plantas menos
competitivas, y Figueruelas es la más competitiva" del grupo en
Europa, remarcó.
Así, el apoyo del Gobierno español a GM dependerá de que el
ajuste se realice con criterios industriales y de competitividad,
así como del plan industrial que se le asigne a la fábrica
zaragozana.
Ahora es el momento de "sentarse a discutir con la empresa el
plan industrial y su viabilidad, y ofrecer garantías financieras",
aunque la empresa "no las ha pedido hasta ahora", precisó Sebastián.
El ministro precisó, en declaraciones a los medios de
comunicación, que el Gobierno mantendrá una primera reunión con la
dirección de GM para analizar el plan en un plazo de "dos o tres
semanas", después de que los sindicatos analicen y se manifiesten
sobre el mismo, ya que el visto bueno de la plantilla será
indispensable para el apoyo del Ejecutivo.
Durante su comparecencia y en respuesta a los comentarios del
senador del Grupo Parlamentario Popular por Zaragoza José Atarés,
Sebastián dijo que el Ejecutivo se ha mantenido "activo" en el
proceso de reestructuración de GM, con "gran cantidad" de viajes y
reuniones que han buscado "la mejor solución" para la planta
española, y remarcó que "discreción no es inacción".
José Atarés instó a Sebastián a "implicarse claramente" y "hacer
visible el apoyo" del Gobierno a la planta de Figueruelas, y
aprovechar la presidencia española de la Unión Europea para
"coordinar" las medidas que puedan tomar los países europeos con
plantas de Opel.
El senador del PP subrayó la necesidad de dar "tranquilidad" al
sector de la automoción en general, y especialmente a la planta
zaragozana y a toda su industria auxiliar, de la que dependen miles
de puestos de trabajo. EFE