San Juan, 15 jun (EFE).- El sector hotelero puertorriqueño bajó
hasta un 40 por ciento sus tarifas para salvar la temporada de una
industria que supone cerca del 7% de la economía, señaló hoy a Efe
la presidenta de la Asociación de Hoteles y Turismo de la isla
caribeña, Clarisa Jiménez.
La fuerte bajada del precio de las habitaciones, agregó Jiménez,
fue una medida necesaria para afrontar una crisis económica que ha
hecho disminuir el número de viajeros en todo el mundo.
Jiménez explicó que según los últimos datos disponibles de la
temporada alta en Puerto Rico, en el pasado mes de enero la
ocupación hotelera en la isla sólo alcanzó el 63,7 por ciento, cifra
modesta para uno de los meses más importantes para el sector.
La presidenta de la patronal del turismo puertorriqueño subrayó
que los hoteles bajaron el precio por habitación -promedio- hasta
los 133 dólares durante el pasado invierno, cantidad lejana de los
200 dólares de años precedentes.
Jiménez detalló que esa bajada de precios afectó
considerablemente las finanzas de las compañías del sector en la
isla, que cuenta con 14.000 habitaciones distribuidas en un total de
166 hoteles, la gran mayoría en manos de empresarios locales.
La directiva señaló que la bajada en el número de turistas que
visitaron Puerto Rico durante la pasada temporada alta de la isla se
tradujo además en un ajuste de las plantillas de los hoteles, que en
conjunto emplean a cerca de 70.000 trabajadores.
Jiménez resaltó que los hoteles de Puerto Rico sufren de manera
especial la caída de turistas, ya que la reducción de ingresos
incide en unas empresas que soportan, a su vez, subidas paulatinas
en los costes operacionales.
"Los hoteles puertorriqueños se enfrentan a leyes laborales que
encarecen los costes", dijo, tras afirmar que los empresarios del
sector tienen que asumir también unos precios energéticos altos en
comparación con los países del entorno de la isla caribeña.
En cuanto a las perspectivas para la temporada baja -los meses de
verano-, dijo que "agosto y septiembre son los más complicados",
aunque matizó que espera que el turismo nacional salve la parte del
año más difícil para el sector en Puerto Rico.
"Julio suele tratarse de un buen mes gracias al turismo local y
este año pensamos que la ocupación puede ser alta", indicó la
presidenta de la patronal.
La directiva dijo que pese a las dificultades, Puerto Rico cuenta
con una situación de privilegio respecto a sus competidores
caribeños, gracias a sus mejores infraestructuras y a las modernas
instalaciones de sus hoteles, tras las reformas llevadas a cabo en
los últimos años en la mayoría de los establecimientos.
Puerto Rico, según Jiménez, dispone de una oferta más variada que
otros países de la zona que permite a la isla recibir turismo
vacacional, de carácter corporativo -negocios- y de ferias y
convenciones, gracias al palacio de exposiciones de San Juan, el más
grande del Caribe.
Puerto Rico espera recibir este año cerca de un millón y medio de
turistas, cifra que sumada a los que llegan a la isla a través de
las escalas de los cruceros se elevaría a los cuatro millones. EFE