París, 22 feb (EFE).- El tráfico aéreo se va a ver alterado
durante toda la semana en Francia a causa de una serie de huelgas
que se encadenan desde hoy, la de más trascendencia la de los
controladores aéreos que se desarrolla desde mañana y hasta el
sábado.
El paro de los pilotos de Lufthansa, que debe prolongarse hasta
el jueves, a media mañana de hoy había provocado sólo unas pocas
anulaciones de vuelos de la compañía germana entre Alemania y París,
según las autoridades de los aeropuertos de la capital francesa.
Mayores problemas se esperan por la protesta convocada por cuatro
sindicatos de los controladores aéreos franceses (CGC, CGT, FO y
UNSA) a los que se añadirá un quinto (CFDT) hasta el sábado por la
mañana.
La Dirección General de la Aviación Civil (DGAC) comunica esta
tarde sus previsiones esta tarde pero "Le Parisien" avanzó que
alrededor del 50% de los vuelos que operan en el aeropuerto de
París-Orly podrían verse afectados, mientras que en la mayor
plataforma de la capital francesa, Roissy Charles de Gaulle, ese
porcentaje podría ser del 10-20%.
La situación debería ser muy desigual en los otros aeropuertos
franceses por esta huelga de los controladores en protesta por los
planes de las autoridades de Francia, Alemania, Suiza, Bélgica,
Holanda y Luxemburgo para fusionar sus servicios de aquí a 2012.
Los sindicatos, que temen un deterioro de sus condiciones
laborales, aseguran que esa puesta en común del control aéreo de los
países centrales en Europa redundará en retrasos suplementarios para
los viajeros y esperan movilizar con el paro al menos al 40% de la
plantilla.
La posición es muy distinta en la DGAC, cuyo director general,
Patrick Gandil, ha considerado que ese proyecto "altamente deseable
mejorará el servicio público a los viajeros europeos sin tocar los
estatutos de los funcionarios".
En concreto, según Gandil permitirá "mejorar la circulación,
reducir la longitud de las rutas aéreas -y por tanto bajar el
consumo de queroseno-, gestionar mejor las zonas militares y reducir
los retrasos" gracias a una reorganización de "las misiones de los
diferentes centros de navegación europeos".
Otro de los puntos de discordia de la DGAC con los controladores
franceses son las supresiones de puestos de trabajo (200 este año)
mediante la no renovación de uno de cada dos de los empleados que se
jubilen.
El viernes se inicia otro paro organizado por tres sindicatos
minoritarios de pilotos de Air France (Alter, SPAF y UNPL) contra
los cambios en el sistema de remuneración de los vuelos de media
distancia y por la reducción del volumen de actividad en el negocio
de carga.
Teniendo en cuenta que el Sindicato Nacional de Pilotos de Línea
(SNPL, el mayor de la compañía francesa) no secunda la huelga, la
dirección de Air France no ha anulado de momento ningún vuelo y
espera un seguimiento bajo. EFE