Arantxa Iñiguez
Fráncfort (Alemania), 6 ago (EFE).- El presidente del Banco
Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, consideró hoy
"apropiados" los tipos de interés para la zona del euro en el actual
1 por ciento, lo que significa que permanecerán en este nivel
durante un tiempo.
Tras la reunión del consejo de gobierno en la sede de la entidad
en Fráncfort, Trichet dijo que la actividad económica será débil en
lo que queda de este año y en 2010, "tras una fase de
estabilización", se producirá una recuperación gradual con tasas de
crecimiento trimestrales positivas.
El máximo órgano ejecutivo del BCE no discutió si este 1 por
ciento es el nivel mínimo al que se va a situar su tasa rectora en
los próximos meses.
Por su parte, el Banco de Inglaterra también mantuvo los tipos en
el Reino Unido en el mínimo histórico del 0,5 por ciento, como
esperaban los mercados, y por sorpresa amplió en 50.000 millones de
libras, hasta 175.000 millones (205.000 millones de euros), la
dotación de su programa de reactivación económica.
Desde comienzos de octubre del pasado año, el BCE ha reducido el
precio del dinero para la zona del euro en 3,25 puntos porcentuales,
hasta el actual 1 por ciento, un nivel históricamente bajo.
Trichet instó a los bancos comerciales "a hacer su trabajo" y a
conceder préstamos a las empresas y a los hogares para contribuir a
la recuperación económica.
Pese a que el precio del dinero es muy bajo actualmente y el BCE
ha prestado a los bancos comerciales toda la liquidez que necesitan,
los institutos de crédito han reducido la concesión de préstamos, lo
que puede impedir la recuperación de la economía.
Trichet recordó que la tasa de crecimiento anual de los préstamos
al sector privado en la zona del euro cayó en junio hasta el 1,5 por
ciento, un valor mínimo histórico desde el comienzo de la tercera
fase de la Unión Económica y Monetaria (UEM) el 1 de enero de 1999.
El presidente del BCE pronosticó que "nuestra acción política
debería impulsar la economía progresivamente" ya que la transmisión
de la política monetaria se produce con retraso.
Trichet se mostró convencido de que la política monetaria y todas
las medidas que ha adoptado el BCE hasta ahora apoyarán a las
empresas y a los hogares.
El BCE señaló que aunque "la incertidumbre es todavía elevada",
"hay señales crecientes de que la recesión global ha tocado fondo".
En lo que respecta a la zona del euro, el banco europeo considera
que "las últimas encuestas sugieren que el ritmo de contracción se
ralentiza claramente".
No obstante, el consejo de gobierno del BCE hizo hincapié en que
"la incertidumbre es elevada y que debemos estar preparados para una
volatilidad en las cifras que lleguen".
Respecto a los precios, el BCE prevé que dure poco el actual
episodio de tasas de inflación extremadamente bajas o negativas y
que volverán al terreno positivo a finales de este año. La entidad
considera que estos movimientos a corto plazo no son relevantes para
la política monetaria.
El economista jefe de Commerzbank, Jörg Krämer, pronosticó que el
BCE mantendrá los tipos de interés en el 1 por ciento en lo que
queda de año, incluso en el caso de que las cifras de crecimiento
económico sorprendan al BCE y los mercados financieros especulen con
una subida.
Krämer opina que el BCE revisará algo al alza sus cautelosos
pronósticos de crecimiento en septiembre, cuando dé a conocer sus
últimas proyecciones de crecimiento e inflación.
El BCE prevé actualmente que la economía de la zona del euro se
contraerá un 4,6 por ciento este año y un 0,3 por ciento en 2010 con
una tasa de inflación media del 0,3 por ciento este año y del 1 por
ciento el próximo.
Además, el BCE está dispuesto a mantener su programa de compra de
bonos garantizados, conocidos en España como cédulas hipotecarias y
territoriales, por un volumen total de 60.000 millones de euros,
para ayudar un sector del mercado muy castigado en la crisis y muy
importante porque ha sido una fuente de financiación habitual de los
bancos. EFE