Wall Street pendiente de escuchar a la Reserva Federal

Víctor Martín

Nueva York, 9 ago (EFE).- Los inversores de Wall Street se animaron hoy a comprar valores bursátiles aunque con moderación y dirigen ahora toda su atención a la reunión de este martes de la Reserva Federal y al análisis que hará de la marcha de la economía de Estados Unidos.

El Comité del Mercado Abierto de la Reserva Federal (banco central) se prevé que mantendrá los tipos de interés entre el 0% y el 0,25% y no se descarta que el comunicado que emite al final de sus reuniones muestre un tono más sombrío acerca de la marcha de la economía, a la vista de lo que indicaron datos recientes.

El mercado bursátil ya se sobresaltó a finales del pasado mes, nada más escuchar al presidente de la Reserva, Ben Bernanke, afirmar durante una comparecencia en el Senado que el panorama económico en EE.UU. es "inusualmente incierto".

Otros datos del informe conocido como "libro beige", difundido por la Reserva también a finales del mes pasado, reflejó que el crecimiento económico fue más lento o se detuvo a mediados de julio en numerosas regiones de las doce en que divide al país.

El sector manufacturero avanzó también en julio a menor ritmo que el mes anterior y el Departamento de Trabajo informó el pasado viernes que la economía perdió 131.000 empleos en ese mes, después de destruirse 221.000 en el anterior.

Con ese panorama de fondo, los inversores calibrarán con sumo detenimiento cada línea del comunicado que emitirá la Reserva a falta de menos de dos horas para que concluya la sesión bursátil y de esa interpretación puede depender la dirección que tome el mercado a corto plazo.

Esta primera jornada de la semana fue por tanto de transición, debido también a la ausencia de referencias puntuales acerca de la marcha de la economía, aunque no para la tecnológica Hewlett-Packard, que sufrió un serio correctivo después de la sorprendente dimisión el pasado viernes de su consejero delegado, Mark Hurd, implicado en un escándalo con una ex contratista.

Las acciones de esa empresa se depreciaron este lunes el 7,99% o 3,70 dólares y cerraron a 42,60 dólares, con lo que acumulan un descenso del 17,3% en lo que va de año.

El fuerte retroceso de esa empresa contrastó con la subida de las acciones de McDonald's (1,64%), que al igual que la anterior forma parte del índice Dow Jones de Industriales y que registró en julio un incremento del 7% en sus ventas mundiales y de un 5,7% en el mercado estadounidense.

Los principales indicadores bursátiles mantuvieron una moderada tendencia alcista desde la apertura y el Dow Jones finalizó con un alza del 0,42% (45,19 puntos) y concluyó en 10.698,75 unidades, al tiempo que el selectivo S&P 500 avanzó el 0,55% (6,15 puntos), a 1.127,79 puntos.

El índice compuesto del mercado Nasdaq ascendió el 0,75% (17,22 puntos) y finalizó en 2.305,69 unidades.

La depreciación de Hewlett-Packard fue notablemente superior a la que sufrieron JPMorgan Chase (-1,53%), General Electric (-0,43%) y Bank of America (-0,36%), que junto a la anterior fueron los únicos de los treinta componentes del Dow Jones que cerraron en negativo.

La jornada tuvo un cariz bien distinto para las tecnológicas Cisco Systems (2,91%) e IBM (1,43%), además de las telefónicas AT&T (1,21%) y Verizon (1,05%) y las farmacéuticas Pfizer (1,11%) y Merck (1,09%), entre otras.

Fuera de ese índice, los títulos de la petrolera BP que se negocian en Nueva York perdieron el 1,14% de valor, cuando esa empresa está en la recta final de las operaciones de sellado del pozo averiado en el Golfo de México.

Esta empresa además anunció que ha hecho un depósito inicial de 3.000 millones de dólares en su fondo de compensación a los afectados por el vertido, al que destinará 20.000 millones.

El barril de crudo de Texas se revalorizó 0,96% o 78 centavos y concluyó a 81,48 dólares en el mercado neoyorquino del petróleo.

La divisa estadounidense se fortaleció ante el euro y por esa moneda europea se pagaban 1,3228 dólares al cierre del mercado bursátil, en tanto que la deuda pública estadounidense a diez años bajaba de precio y ofrecía una rentabilidad del 2,83 por ciento. EFE