Gemma Casadevall
Berlín, 25 oct (EFE).- El líder del Partido Liberal (FDP), Guido
Westerwelle, se erigió hoy en artífice de la rebaja fiscal "milagro"
y del nuevo rumbo del gobierno de la canciller Angela Merkel, del
que será vicecanciller y ministro de Asuntos Exteriores, aunque con
clara vocación de intervenir sobre todo en el ámbito económico.
"Logramos todos nuevos objetivos electorales, primero, y logramos
ahora hacer prosperar todas nuestras propuestas en las negociaciones
de coalición", enfatizó Westerwelle, ante el congreso del FDP que
ratificó por aclamación el pacto de gobierno con la Unión de Merkel.
Alemania está "ante un nuevo comienzo", dijo, y este nuevo
comienzo lleva el "sello liberal". "Somos un partido para todo el
pueblo, para toda Alemania, para todas sus familias", añadió el
líder del FDP, decidido desde la recuperada función gubernamental a
romper el tradicional estigma del partido "de los sueldos altos".
A Westerwelle se le identifica con el ámbito financiero, pero
asumirá Exteriores de acuerdo a la ley no escrita de las alianzas
alemanas, según la cual ésta es competencia del socio de gobierno.
"Con valor, por el futuro de nuestro país", fue el lema del
congreso, cuyo único fin era ratificar el pacto de coalición
presentado ayer por Merkel, presidenta de la Unión
Cristianodemócrata (CDU), su homólogo de la Unión Socialcristiana de
Baviera (CSU), Horst Seehofer, y Westerwelle.
"La política fiscal anunciada se puede calificar de acto de
valor, pero no en el sentido positivo", comentó irónicamente el
economista Ralph Brügelmann, del Instituto Económico Alemán (IW), en
declaraciones al semanario "Der Spiegel".
Los planes fiscales contemplan una descarga fiscal del orden de
los 24.000 millones de euros (de forma gradual y hasta 2013), entre
rebajas del IRPF e impuestos a las empresas y las herencias, así
como un aumento de las ayudas a la familia.
No hay una financiación clara para estos planes, más allá de la
confianza en el pronto despegue económico, recuerdan los expertos.
La política fiscal no será competencia del FDP, sino del ministro
de la CDU Wolfgang Schäuble, pero el monto de esas rebajas ha sido
el principal caballo de batalla del FDP, hasta lograr que la Unión
subiera de su promesa inicial -15.000 millones de euros- a 24.000.
Schäuble ha admitido que Alemania deberá afrontar en esta
legislatura una "deuda exorbitante" derivada de los programas de
estimulación económica puestos en marcha para salir de la crisis y
recordó que Alemania tiene el endeudamiento más alto de su historia.
Westerwelle defiende, sin embargo, las rebajas fiscales como la
fórmula para salir de la crisis y ésta es asimismo la premisa que ha
llevado a su formación de retorno a las tareas gubernamentales. EFE