Tokio, 1 sep (EFE).- El presidente del Gobierno español, José
Luis Rodríguez Zapatero, defendió hoy en su primera visita oficial a
Japón las reformas del mercado laboral y del sistema de pensiones
español para tranquilizar a los inversores del país asiático, a los
que invitó a incrementar su presencia en España.
Zapatero comenzó la jornada en el Japan National Press Club, la
principal asociación de prensa del país, y concluyó el día con una
cena con el primer ministro japonés, Naoto Kan, con quien acordó
fomentar las relaciones comerciales y la colaboración en ciencia y
tecnología.
Ante los periodistas japoneses, que expresaron sus dudas sobre la
salud de la economía española y la preocupación de los inversores
por su deuda, Zapatero ratificó la "seriedad y fortaleza" del Tesoro
español y destacó el éxito de las últimas emisiones de deuda.
Tras opinar que el país ha sabido superar los rumores con el
proceso de ajustes y reformas emprendido, garantizó que "España ni
ha pedido, ni ha necesitado, ni necesita asistencia ni de la UE ni
del FMI".
Según explicó, quedan "dos o tres años de reformas y de
aplicación de estas reformas" en los que España debe crecer sin
incrementar el gasto público y en los que "el gran tema" será si el
país es capaz de crear empleo con ese crecimiento "débil".
En este contexto, defendió la reforma laboral diseñada con la
oposición sindical porque, dijo, "los sacrificios de hoy" son "la
puerta al bienestar de mañana".
"Un gobierno responsable sabe que hay momentos en la historia de
su país que tiene que tomar decisiones, aunque éstas sean difíciles
y duras; lo he hecho y lo seguiré haciendo si es necesario, porque
está en juego el futuro del bienestar del país", aseveró.
Zapatero mostró su respeto ante la convocatoria de huelga general
para el 29 de septiembre y garantizó que "al día siguiente de la
huelga" continuará con esa misma actitud de diálogo.
Tras defender la solidez del sistema financiero español, la
austeridad de los próximos presupuestos y su compromiso de reducir
el déficit, se mostró convencido de que las reformas en marcha
representan "uno de los mayores procesos de transformación de la
economía española de las ultimas décadas".
Enmarcó en ese contexto también la reforma del sistema de
pensiones y reiteró en que confía en aprobar el proyecto de ley
antes de fin de año con el consenso del PP, el principal partido de
la oposición, aunque asumió que no será fácil contar con el apoyo de
los sindicatos.
Después de asistir a una recepción a la colectividad española en
la residencia del embajador español en Japón, Zapatero se reunió con
el primer ministro japonés, Naoto Kan, que se juega el puesto dentro
de dos semanas.
Tras garantizar el apoyo de España para que se suscriba un
acuerdo comercial entre la UE y Japón, abogó por incrementar las
relaciones bilaterales.
Apostó en concreto por proyectos conjuntos de ciencia y
tecnología, uno de los objetivos del acuerdo de colaboración firmado
hoy en Tokio por la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina
Garmendia; y por incrementar los vínculos empresariales y
comerciales.
En este contexto, animó a las empresas japonesas a seguir
instalándose en España y mañana se reunirá con empresarios
japoneses.
En la agenda del segundo y último día de su visita oficial a
Japón ha incluido también una entrevista con el presidente de honor
de Mitsubishi, después de la cual cogerá el tren bala Kioto para
visitar en Kioto la fábrica GS Yuasa de baterías eléctricas para
automóviles. EFE