La gestora tiene en activo el QMC III Iberian Capital Fund, que también invierte en el segmento del Ibex Small Cap aunque su radar de empresas está más bajo, inferior a los 2.500 millones de capitalización. En realidad, su nueva estrategia es un complemento o una continuación de la anterior, ya que invierte en la parte del mercado donde la otra no puede. La capitalización media de las compañías que entren en el QMC Iberian Opportunities es justo el tope del anterior, y podrán llegar hasta los 5.000 millones.
Según su folleto, invertirá en una cartera concentrada de entre 12 y 15 compañías, una libertad que le da el ser un fondo de inversión libre (FIL), los ‘hedge funds’ a la española. Sus participadas, donde también tienen cabida las portuguesas, tienen que ser “líderes globales en nichos de mercado, tener equipos gestores con una amplia y exitosa trayectoria, estar reforzadas tras periodos de crisis globales, tener ventajas competitivas perdurables en el tiempo y presentar un balance saneado y bajo apalancamiento financiero”. Se excluyen, no obstante, las inmobiliarias y las financieras.