Madrid, 8 feb (.).- La gestora holandesa Robeco ha asegurado que la economía española, especialmente en cuanto a su financiación, podría beneficiarse por la incertidumbre en Francia e Italia y la llegada de turismo de países mediterráneos, en un año de citas electorales en el que el populismo es un "riesgo" para Europa.
Las "buenas perspectivas" para España en 2017, ha manifestado el economista jefe de Robeco, Léon Cornelissen, durante un encuentro sobre la visión de los mercados, se basan en la previsión de que el crecimiento del PIB español pueda ser "más alto" de lo esperado debido a la estabilidad, la inflación y la situación en Francia.
En este contexto, los inversores están eligiendo el bono español frente al galo y al italiano debido a lo "devastadora" que podría ser para los mercados que Marine Le Pen llegue a la presidencia francesa y cumpla sus amenazas con la salida del país de la zona euro, el "frexit".
La líder ultraderechista tendría un 25 % de opciones de ganar, según Cornelissen, un porcentaje de riesgo "alto" para los inversores, que "han aprendido la lección" de la "inesperada" elección de Donald Trump en Estados Unidos o del "brexit".
A estas "tensiones", que influyen en la subida del interés del bono galo, se suma la "preocupación" en el Viejo Continente por Grecia, donde el Gobierno negocia el tercer rescate con el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional, este último pendiente de la administración Trump.
Por otra parte, las citas electorales en Holanda, Alemania y "probablemente" en Italia también preocupan a los mercados, en especial en el caso italiano, donde las perspectivas de crecimiento "no son tan buenas", lo que afecta a su prima de riesgo.
Además, el economista ha apuntado que el "brexit" terminará por "dañar" la economía británica este año, especialmente porque para la balanza comercial del Reino Unido "es más importante Europa" que en el sentido inverso.
La apuesta de Robeco a largo plazo es por el dólar, que "se hará más fuerte" por la situación en Europa y el crecimiento de la economía norteamericana, dependiendo de las decisiones del nuevo presidente de Estados Unidos.
Trump y la deuda de las empresas estadounidense son otros "riesgos" para la economía del país, a la expectativa de los posibles estímulos fiscales del magnate, de lo cual estará pendiente la Reserva Federal.
Este problema afecta también a China, cuya deuda crece "de forma insostenible", ha declarado Cornelissen, y que unido a la posible confrontación con Estados Unidos podría generar problemas en el futuro.