Bruselas, 15 nov (EFE).- Los Veintiocho no prevén llegar hoy a un acuerdo general sobre el mecanismo único de resolución bancaria para la zona euro por las marcadas diferencias que existen entre ellos sobre quién debe ser la autoridad que tenga la última palabra para liquidar un banco.
Mientras Alemania es partidaria de que esa máxima autoridad decisoria sea el Consejo, Francia defiende que sea la Comisión Europea (CE).
"No creo que podamos cerrar el expediente hoy", sostuvo el miembro alemán del comité ejecutivo del Banco Central Europeo (BCE), Jörg Asmussen, a su llegada al Consejo de ministros europeos de Economía y Finanzas (Ecofin) que se celebra hoy en Bruselas.
"Espero que podamos reducir las diferencias que aún existen", continuó Asmussen, en referencia a la creación de una agencia y de un fondo único europeo al que recurrir en los procesos de liquidación de entidades.
Asmussen explicó que tiene que haber "criterios claros" sobre el papel que debe desempeñar la agencia de resolución, y recordó que tendrá que tomar decisiones rápidas sobre la liquidación de entidades de acuerdo con la estabilidad financiera y que su creación no debe implicar cambios en los tratados.
"Hay que dejar muy claro que el BCE no debería y no será la agencia de resolución, nosotros nos encargaremos de la supervisión bancaria, y esta tarea es muy distinta de la de resolución", agregó.
Asmussen sí confió en que se logre un acuerdo antes de finales de año sobre el conjunto del mecanismo único de liquidación bancaria.
Recalcó además que antes de iniciar un proceso de resolución es "absolutamente necesario" contar con "mecanismos creíbles" a los que recurrir como los mercados privados, el presupuesto nacional o fondos nacionales de rescate bancario y el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), así como que los países dejen clara su "voluntad" de utilizar estos cortafuegos.
El ministro francés de Finanzas, Pierre Moscovici, subrayó que París quiere una "unión bancaria global, ambiciosa y completa" y recalcó que para lograrlo se necesita un "mecanismo de resolución extremadamente sólido".
Este mecanismo deberá contar con una autoridad que se apoye en la CE, un fondo único de resolución y con la posibilidad de utilizar el MEDE para la recapitalización directa de entidades, añadió.
Moscovici insistió en que "es muy importante que esta posibilidad exista".
La ministra danesa de Economía, Margrethe Vestager, consideró que el "punto clave" de la negociación es precisamente si la competencia para decidir sobre las liquidaciones bancarias recae sobre la CE o sobre el Consejo.
"No creo que sea exactamente cómo la Comisión lo puso sobre la mesa", comentó en referencia a la propuesta original del Ejecutivo comunitario sobre el mecanismo de resolución bancaria y confió en que las negociaciones de hoy permitan lograr progresos.
Por su parte, el ministro lituano de Finanzas, Rimantas Sadzius, cuyo país ocupa la presidencia de turno de la UE, coincidió con Asmussen en que "no se prevé un acuerdo final" en la reunión de hoy, y reconoció que "aún se está lejos de ese punto" por las divergencias que existen entre países.
Esperó, no obstante, que se pueda llegar a un acuerdo antes de finales de año y recalcó la importancia de que todos los Estados apoyen la decisión.
El ministro sueco de Finanzas, Anders Borg, también se mostró poco optimista sobre la posibilidad de tomar una decisión este viernes, pero confió en que se logren progresos que permitan cerrar un acuerdo en diciembre.
"Sería una ventaja para Europa contar con una unión bancaria fuerte y unos cortafuegos fuertes, lo que reforzaría la recuperación y ayudaría a la economía", señaló.
El ministro de Finanzas de Luxemburgo, Luc Frieden, por su parte, afirmó que "no tiene sentido cerrarlo hoy porque las posiciones se alejan demasiado". EFE
cae-mrn/emm/ltm
(foto) (vídeo) (audio)