Buenos Aires, 11 oct (EFE).- El oficialismo argentino consiguió aprobar hoy en la Cámara de Diputados el proyecto de Presupuesto 2013, que prevé un crecimiento del 4,4 por ciento y una inflación del 10,8 por ciento.
El proyecto, que debe ser debatido también en el Senado, fue discutido durante doce horas en la Cámara alta hasta que logró la aprobación, avanzada la madrugada.
Los legisladores de la oposición consideraron que la propuesta subestima los recursos de los que dispondrá el Ejecutivo el próximo año y volvieron a criticar los datos oficiales.
"Las estadísticas oficiales sobre las que se basa el Presupuesto inflan el crecimiento para hacernos pagar más deuda, ocultan millones de pobres y dicen que ya no hay indigencia en el noroeste argentino", cuestionó Claudio Lozano, del bloque Unidad Popular.
El diputado oficialista Fabián Ríos argumentó que las proyecciones del Gobierno se definen en "un contexto internacional" que requiere de "audacias y decisiones que apunten a defender a los argentinos en una situación compleja".
"Son criterios que van en línea de lo que el Gobierno toma como eje central de su política en términos de equidad", afirmó.
El Presupuesto fija un superávit primario (antes del pago de deudas) de 65.893 millones de pesos (13.960,3 millones de dólares), equivalente al 1,70 por ciento del producto interior bruto (PIB), con un crecimiento del gasto público del 16,3 por ciento.
El Gobierno de Cristina Fernández prevé que en 2013 el tipo de cambio será de 5,10 pesos por dólar, con exportaciones por 549.387 millones de pesos (116.395 millones de dólares) y un superávit comercial de 13.325 millones de dólares.
Calcula que los pagos de deuda pública equivaldrán al 2,17 por ciento del PIB, unos 55.305,6 millones de pesos (11.293 millones de dólares). EFE