Bruselas, 6 oct (EFE).- El Tribunal de Justicia de la Unión
Europea concluyó hoy que la Comisión Europea (CE) debe revisar las
condiciones de venta de la farmacéutica GlaxoSmithKline (GSK) en
España para determinar si pueden quedar exentas de las normas
comunitarias de competencia.
La Corte confirma así la decisión que ya había adoptado el
Tribunal de Primera Instancia de la UE, en la que indicaba que el
examen realizado por la Comisión no había sido suficiente.
GSK acordó en 1998 con los mayoristas españoles que los precios
de ciertos medicamentos variasen dependiendo de si los vendían en
España o los exportaban a otros países de la UE.
El objetivo de la medida era limitar el comercio paralelo de
medicamentos que llevaban a cabo algunos intermediarios debido a las
diferencias de precio entre España y otros estados miembros.
El Ejecutivo comunitario consideró que las nuevas condiciones
vulneraban la prohibición de acuerdos restrictivos de la competencia
y que GSK no había demostrado que la medida contribuía a fomentar el
progreso técnico y, por tanto, no se daban las condiciones adecuadas
para recibir una exención a la aplicación de la normativa
comunitaria.
La farmacéutica recurrió la decisión de la CE ante el Tribunal de
Primera Instancia y, aunque este tribunal estuvo de acuerdo con
Bruselas en que las nuevas condiciones vulneraban la prohibición de
prácticas colusorias, anuló su decisión al considerar que no había
examinado adecuadamente la petición de exención de GSK.
En concreto, el Tribunal estimó que Bruselas no había examinado
con suficiente detalle si las condiciones generales de venta podían
generar una ventaja económica mediante su contribución a la
innovación.
GSK, la CE y dos asociaciones de comerciantes de productos
farmacéuticos recurrieron la sentencia del Tribunal de Primera
Instancia en casación por diferentes motivos, pero el Tribunal de la
UE decidió hoy desestimar todos los recursos.
En opinión de esta corte, el Tribunal de Primera Instancia había
considerado acertadamente que el examen de la CE era deficiente ya
que no tuvo en cuenta todos los elementos pertinentes aportados por
GSK.
En consecuencia, la Comisión deberá volver a examinar si la
farmacéutica puede beneficiarse de una exención de la normativa
comunitaria. EFE