Investing.com - En un día cargado de datos macroeconómicos, finalmente han sido las palabras de la presidenta de la Fed, Janet Yellen, y la creciente tensión en Ucrania los factores que han hecho a los mercados decantarse por las ventas. De este modo, la sesión de hoy se saldó con un retroceso para el IBEX 35 del 0,83%, hasta los 10.103,5 puntos.
A nivel de acciones, tres constructoras han sido las principales protagonistas del día, con suerte muy distinta. La cara ha sido para ACS (ACS.MADRID), que ha encabezado las subidas con un alza del 3,56%; y la cruz, para Sacyr (SCYR.MADRID) y FCC (FCC.MADRID) con un retroceso del 5,84% y del 3,79%, respectivamente.
Tras comenzar la sesión a la baja, el principal selectivo del parqué madrileño rebotó en los 10.071,6 puntos y logró escalar hasta los 10.247,8, animado por los buenos datos que iban llegando del otro lado del Atlántico, en donde las buenas cifras de inflación, de ventas de las cadenas de distribución y de salarios reales han conseguido compensar buena parte de la decepción del ZEW germano.
Sin embargo, las palabras de Yellen esbozando una posible falta de liquidez por parte de los grandes bancos estadounidenses para apuntalar al sistema ante futuras crisis acabaron por suponer un auténtico jarro de agua fría para los mercados. El Ibex no fue una excepción y se precipitó rumbo a los 10.100 puntos, que logró salvar con mucho sufrimiento.
Mientras tanto, en Europa, las grandes plazas registraron una tendencia similar, con el FTSE Mib liderando las correcciones (-2,33%), seguido del Dax (-1,77%), el Euro Stoxx 50 (-1,28), el Cac 40 (-0,89%) y el FTSE 100 (-0,64%).
Especialmente remarcable ha sido la evolución de la deuda soberana española en el mercado secundario. El mayor temor de los mercados a la evolución del conflicto en el Este de Ucrania ha hecho aumentar el apetito inversor por la renta fija, lo que ha llevado los tipos de las obligaciones españolas a 10 años por debajo del 3,1%, algo que no sucedía desde el año 2005.
Del mismo modo, aunque la condición de valor refugio del bono alemán también ha atraído a muchos inversores, el buen desempeño de la deuda patria ha permitido a la prima de riesgo de España situarse, por momentos, por debajo de los 160 puntos, unos registros que no se veían desde el año 2010.