Londres, 23 jul (EFE).- El presidente del Banco Central Europeo,
Jean-Claude Tirchet, aboga hoy en el Financial Times por recortes
del gasto público y subida de impuestos en todo el mundo
industrializado como receta para superar la crisis de endeudamiento.
En un artículo que publica en el periódico británico, Trichet
afirma que no tiene razón quienes quieren prolongar las medidas de
estímulo y señala que una reducción crediticia tendría "un impacto
muy limitado" en el crecimiento económico.
Ese punto de vista, señala el Financial Times, contrasta con los
llamamientos procedentes de Estados Unidos que piden que se aplacen
hasta el próximo año como muy pronto las medidas destinadas a
restringir el gasto público.
Trichet critica, sin nombrarlos, a Estados Unidos y al Fondo
Monetario Internacional al escribir que "ahora vemos qué
desafortunado era el mensaje simplista enviado (hace un año) a todas
las economías industriales bajo el lema de "estimular, activar,
gastar".
El punto de vista norteamericano a favor de continuar los
estímulos económicos a corto plazo lo reiteró ayer el presidente de
la Reserva Federal estadounidense, Ben Bernanke, señala el diario.
En su testimonio ante el Congreso, Bernanke expresó su apoyo a
los esfuerzos fiscales destinados a aumentar la demanda antes de que
EEUU se embarque en un "bien controlado" plan de reducción del
déficit a largo plazo.
"A corto plazo, creo que deberíamos mantener un nivel razonable
de apoyo fiscal", dijo Bernanke a los legisladores norteamericanos.
El presidente del BCE señala en su artículo que el deterioro
fiscal que experimenta Europa no tiene precedente en magnitud ni en
el número de países a los que afecta.
A finales de año, la deuda gubernamental en la zona del euro
habrá crecido en más de un 20% en sólo cuatro años, dice Trichet.
El Banco Central Europeo, asegura, hará lo que esté de su parte
para consolidar el entorno económico garantizando la estabilidad de
los precios en la zona del euro como lleva haciendo más de una
década.
"Esperamos que los gobiernos confirmen su determinación de
consolidar sus finanzas públicas. Ese compromiso es tan importante
hoy para el paradigma del G20 de crecimiento fuerte, económico y
equilibrado como lo eran ayer las medidas excepcionalmente valientes
que adoptaron esos países para evitar una depresión". EFE