Shanghái (China), 27 abr (EFE).- La media de los beneficios netos de las firmas que cotizan en las bolsas chinas de Shanghái y Shenzhen creció un 5,85 por ciento interanual en el primer trimestre del año, recoge hoy el diario bursátil "Zhongguo Zhengquanbao".
Según los cálculos de este medio, los resultados del primer trimestre suman unos beneficios netos conjuntos, entre las 1.307 empresas que cotizan en los dos parqués, de 111.340 millones de yuanes (16.452 millones de euros, 17.950 millones de dólares).
Sus ingresos por operaciones crecieron en total de media un 2,24 por ciento interanual, hasta 1,44 billones de yuanes (213.956 millones de euros, 232.164 millones de dólares).
Los sectores que obtuvieron mayores beneficios en ese período fueron las corredoras de bolsa y las relacionadas con internet y con la protección medioambiental, gracias, en muchos casos, a encontrarse en momentos de expansión de su campo de trabajo o de actualización y mejora de sus instalaciones y recursos.
Entre tanto, durante el mismo período declinó la rentabilidad de las firmas de maquinaria, minería y siderurgia, entre otros sectores industriales tradicionales.
Estos resultados coinciden con la fuerte racha alcista que están experimentando estos parqués desde el cuarto trimestre de 2014, lo que ha disparado al índice general de Shanghái, el referencial de las bolsas chinas, a superar ya los 4.500 puntos, un nivel que no conocía desde 2008, antes de la crisis económica mundial.
Hace hoy una semana, Shanghái superó por primera vez en su historia el billón de yuanes en un solo día (151.090 millones de euros, 161.267 millones de dólares).
Además, fue la mayor bolsa del mundo por volumen de negocios en marzo, con el equivalente a 1,85 billones de dólares durante todo el mes (1,73 billones de euros), seguida de Shenzhen (sureste chino), con 1,56 billones de dólares (1,46 billones de euros), según la Federación Mundial de Mercados de Valores.
Ambas plazas superaron así en marzo a la de Nueva York (con 1,53 billones de dólares ese mes, unos 1,43 millones de euros), y a la propia bolsa tecnológica neoyorquina Nasdaq (con 1,1 billones de dólares, es decir, 1,03 billones de euros).
Los mercados de valores chinos ya habían empezado una larga racha alcista en noviembre pasado, coincidiendo con una inyección de capital por parte del banco central en el sistema financiero del país, y con que el 17 de noviembre empezó a funcionar un mecanismo de vinculación parcial, mediante cuotas, entre Shanghái y Hong Kong.
Aquello permitió al referencial shanghainés superar en diciembre, por primera vez desde 2011, la barrera psicológica de los 3.000 puntos, marcada como límite de riesgo por los analistas al inicio de la crisis, en 2008, para terminar así el año con un fuerte aumento de un 51,79 por ciento.
Esa inercia positiva continuó durante el comienzo de 2015, y en marzo se disparó, cuando el primer ministro, Li Keqiang, dijo que su Gobierno tiene "muchas" herramientas para incentivar la desacelerada economía china si es necesario.