El lunes, Boeing (NYSE:BA) Co. anunció la reanudación de la producción de sus modelos de aeronaves 767 y 777, tras una pausa provocada por una extensa huelga de trabajadores. La fabricación del modelo 737 ya se había retomado la semana pasada, marcando un avance significativo para las operaciones de la compañía en el Noroeste del Pacífico. Stephanie Pope, directora de la división de jets comerciales de Boeing, confirmó la noticia en LinkedIn, subrayando el enfoque de la empresa en preparar al personal de fabricación con la formación y certificaciones necesarias, así como en organizar estratégicamente el inventario para garantizar una producción sin contratiempos.
La huelga, que se prolongó durante más de 50 días, tuvo un impacto considerable en la estabilidad financiera de Boeing. En consecuencia, la compañía ha señalado que el proceso de recuperación de los niveles normales de producción será gradual. Esto se debe a la necesidad de que algunos empleados se sometan a una recertificación y a la posible pérdida de componentes durante la interrupción de la producción.
Boeing experimentó una fuerte caída en las entregas de aeronaves durante la huelga, registrando en noviembre el número más bajo de aviones entregados en cuatro años. La empresa aclaró que las aeronaves entregadas ese mes fueron todas construidas antes de la huelga, utilizando el inventario existente.
Cabe destacar que la producción del modelo 787 Dreamliner no se vio directamente afectada por la huelga, ya que se ensambla en una planta independiente y no sindicalizada en Carolina del Sur. Sin embargo, este modelo ha enfrentado sus propios desafíos, incluyendo la escasez de equipos de cabina y otros componentes esenciales.
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