Berlín, 4 ene (EFE).- La caída de los mercados bursátiles en China ha arrastrado también a la Bolsa de Fráncfort, cuyo índice DAX perdía a comienzos de la tarde un 4,43 por ciento, lo que representa la caída más fuerte durante una jornada desde finales de agosto de 2015.
Los analistas consideran que la crisis del crecimiento económico en China representa también un problema para los exportadores alemanes, lo que explica que en el primer día de negociación del año el DAX tienda claramente a la baja.
También las turbulencias entre Irán y Arabia Saudí presionan los mercados.
La caída de las cotizaciones -que empezó ya con la apertura y continuó en el curso de la mañana- ha afectado prácticamente a todas las acciones.
Los títulos más afectados han sido los de los consorcios energéticos E-on (DE:EONGn) y RWE (DE:RWEG_p), que han perdido el 4,9 por ciento y el 5,7 por ciento, respectivamente-, el del Deutsche Bank (DE:DBKGn), que ha tenido una caída del 5,4 por ciento.