Oviedo, 21 feb (.).- Caja Rural de Asturias obtuvo el pasado año un beneficio neto de 27,7 millones de euros, lo que supone un 26,6 % más respecto al ejercicio anterior, ha informado este lunes la entidad.
Los recursos gestionados de clientes aumentaron un 7,1 %, hasta 4.563,7 millones de euros, mientras que la inversión crediticia subió un 9,2 %, hasta 2.859,9 millones.
Caja Rural de Asturias cerró el ejercicio con una morosidad del 2,13 %, medio punto menos que al cierre de 2020 (2,64 %).
La caja sumó 19.527 nuevos clientes: 15.715 particulares, 1.994 empresas y 1.818 autónomos.
La entidad formalizó 14.166 operaciones de préstamo por un importe de 567 millones de euros, de los que 243 millones correspondieron a inversión crediticia a empresas.
Caja Rural de Asturias ha logrado este incremento de los resultados después de que en 2020 hubiera reducido su beneficio un 28,3 %, tras realizar provisiones extraordinarias por importe de 11 millones hacer frente a un escenario de deterioro económico por la pandemia de la covid-19.