Nueva York, 28 ene (EFE).- El grupo industrial Caterpillar (N:CAT) ganó en 2015 un total de 2.102 millones de dólares, un 43 % menos que en 2014, pero sus previsiones para el conjunto de 2016 son mejores de lo previsto y sus acciones subían hoy en bolsa.
La compañía de Peoria (Illinois) obtuvo entre enero y diciembre pasados un beneficio neto por acción de 3,50 dólares, comparado con los 5,88 dólares del mismo periodo del ejercicio anterior, cuando sus ganancias alcanzaron los 3.695 millones de dólares.
La facturación de la compañía bajó un 15 % durante el ejercicio 2015 hasta los 47.011 millones de dólares, frente a los 55.184 millones del año anterior, mientras que sus gastos operativos bajaron un 12,2 %, hasta 43.755 millones.
En cuanto a los resultados trimestrales, a los que más atención prestaban los analistas, la empresa perdió 87 millones de dólares (-15 centavos por título), frente a los 763 millones de beneficios que obtuvo en las mismas fechas de 2014.
Los ingresos de Caterpillar se situaron entre octubre y diciembre pasados en 11.030 millones de dólares, un 22,5 % menos que en el último trimestre del año pasado, cuando la facturación ascendió a 14.244 millones.
"Este año tuvimos que tomar medidas de reestructuración difíciles pero necesarias y nuestras ventas siguen bajo la presión de unos precios de materias primas bajos y la debilidad de los países en desarrollo", dijo el consejero delegado, Dough Oberhelman.
El proceso de reestructuración que ha puesto en marcha el grupo industrial tuvo durante el ejercicio 2015 un coste de 908 millones de dólares, que supuso un impacto en sus beneficios de 1,14 dólares por acción.
La empresa anunció también que para el conjunto de 2016 espera tener unas ventas de entre 40.000 y 44.000 millones de dólares y un beneficio neto de 3,5 dólares por acción, por encima de lo que esperaban los analistas.
Los inversores celebraron los pronósticos de la empresa para este año y las acciones de Caterpillar, uno de los treinta valores que cotizan en el Dow Jones, subían un 4 % en la Bolsa de Nueva York, donde se han depreciado un 10,7 % desde que comenzó el año.