Madrid, 18 mar (.).- CCOO y UGT han condenado las agresiones y coacciones que están sufriendo trabajadores del sector de transporte de mercancías por carretera por parte de "grupos violentos asociados al cese de actividad o paro patronal de empresas y algunos autónomos del transporte por carretera".
Ambos sindicatos han pedido en un comunicado este viernes al Gobierno "responsabilidad" en la búsqueda de una solución a la situación, así como que garantice la protección de los asalariados y evite el efecto contagio a otros colectivos.
Ambos sindicatos han dejado claro que "no estamos ante una huelga", que solo cabe que la desarrollen trabajadores con relación laboral y no autónomos y empresas, sino ante un cierre patronal o un cese de actividad empresarial.
Por tanto, han añadido, las movilizaciones no se encuadran en la normativa que regula el ejercicio de un derecho fundamental como es el derecho de huelga y, por ello, "no puede hablarse de la actuación de piquetes informativos ni del ejercicio de un derecho fundamental".
En ese marco, la convocatoria de paro no es una huelga legalmente convocada, por lo que un trabajador o trabajadora asalariada no puede sumarse al paro "sin incurrir en una infracción laboral sancionable", han informado.
"Los trabajadores están siendo rehenes en este conflicto y sufriendo agresiones verbales y físicas que están poniendo en riesgo su propia integridad física" por los convocantes, que también ponen en peligro la cadena de suministros y, por ende, "la continuidad de la actividad, y con ello el empleo, de decenas de miles de personas".
Los sindicatos han instado al Gobierno a que convoque urgentemente a representantes de empresas y trabajadores para evaluar la situación y tomar las decisiones necesarias para buscar una solución a la situación, con medidas inmediatas y otras a corto plazo que ordenen los problemas estructurales que conllevan el desajuste de precios energéticos y del combustible a este sector y a la economía global.