Madrid, 28 dic (.).- La empresa nacional de ferrocarriles de Egipto (ENR) ha comenzado esta semana la operación comercial de los trenes Intercity construidos por Talgo (BME:TLGO), cuyos primeros servicios conectarán El Cairo y la ciudad de Alejandría, ha informado la empresa española.
Para Talgo, este primer paso "confirma el satisfactorio avance" del proyecto adjudicado en abril de 2019 para el suministro de siete unidades y su mantenimiento durante ocho años, por un importe cercano a los 160 millones de euros.
A este primer contrato con ENR, que incluye la construcción de un nuevo taller de Talgo en Egipto, se le sumó el pasado mes de agosto una segunda adjudicación de ENR para la fabricación de otros siete trenes de pasajeros, en este caso destinados a servicios nocturnos y con un importe aproximado de 280 millones.
Ese nuevo proyecto de trenes nocturnos incluirá la construcción de las nuevas unidades en las plantas de Álava (Rivabellosa) y Madrid (Las Matas), así como su mantenimiento en las instalaciones que Talgo tiene ya en Egipto, durante un periodo de 15 años.
Conforme al calendario establecido para este segundo contrato, esos nuevos trenes comenzarán a entregarse a partir de 2024.
El fabricante recuerda en una nota que la plataforma Intercity es una "pieza muy relevante del proceso de modernización" del sistema ferroviario emprendido por el Gobierno egipcio "como parte de una agenda, más amplia y ambiciosa, para la descarbonización de sectores clave de la economía".
Añade que, por la ligereza de la tecnología de rodadura de estos trenes y la construcción en aluminio, los suministrados a Egipto para servicios diurnos "permiten incrementar la capacidad y la calidad del servicio y reducir el consumo energético por viajero transportado, maximizando así la eficiencia y minimizando el impacto medioambiental".
Los trenes Intercity parta el primer contrato con la estatal egipcia son fabricados en la factoría que Talgo tiene en Álava (País Vasco). Cuentan con sistemas de climatización redundantes de alta potencia y han sido certificados para operar hasta los 50 grados centígrados.
Cada unidad se compone de una locomotora y quince coches remolcados, cinco de ellos para primera clase, ocho de segunda clase, uno mixto con cafetería y plazas para personas con movilidad reducida, y un coche técnico, con una velocidad comercial máxima de 160 kilómetros por hora y 490 plazas.