El jueves, Francia publicó una lista de automóviles que pueden acogerse a la normativa revisada del país. Estos cambios incluyen incentivos a la compra de vehículos eléctricos, con preferencia por los producidos en Francia y Europa frente a los procedentes de China.
Se calcula que el 65% de los vehículos eléctricos vendidos en Francia cumplirán las estipulaciones de este programa. A partir del viernes, los nuevos criterios también tendrán en cuenta la cantidad de dióxido de carbono producida durante la fabricación de un vehículo eléctrico.
Dentro de la lista de modelos elegibles, 24 son producidos por la corporación franco-italiana Stellantis (STLA), y el fabricante de automóviles francés Renault tiene cinco modelos que cumplen los requisitos. Cabe destacar que el Model Y de Tesla (NASDAQ:TSLA), propiedad de Elon Musk, cumple los requisitos, mientras que el Model 3 no.
MG Motors, una marca de vehículos eléctricos propiedad de la china SAIC, ha expresado su preocupación por que la modificación de la normativa pueda tener un efecto perjudicial en el sector de los vehículos eléctricos en Francia.
Bruno Le Maire, Ministro de Finanzas de Francia, elogió la nueva normativa por motivar a los fabricantes de automóviles a reducir sus emisiones de carbono.
"Dejaremos de conceder subvenciones a la producción de coches que generen un exceso de CO2", declaró Le Maire.
La administración francesa había ofrecido anteriormente incentivos financieros de entre 5.000 y 7.000 euros para fomentar el uso de vehículos eléctricos, con un gasto total anual de 1.000 millones de euros (1.100 millones de dólares).
Sin embargo, representantes del Ministerio de Hacienda francés han indicado que, debido a la escasez de vehículos eléctricos a precios asequibles producidos en Europa, alrededor de un tercio de estos incentivos acaban en manos de consumidores que adquieren vehículos eléctricos fabricados en China. Esta situación ha contribuido al crecimiento de las importaciones y ha exacerbado la competencia entre fabricantes extranjeros y locales.
Se prevé un cambio significativo, ya que se espera que numerosos vehículos eléctricos fabricados en China no cumplan los requisitos de elegibilidad, en gran parte debido al amplio uso que hace China de la electricidad generada con carbón en su sector automovilístico.
La agencia Ademe, encargada de gestionar el programa, ha evaluado cerca de 500 modelos de vehículos eléctricos, junto con sus diferentes versiones, para determinar su cualificación para el programa de incentivos.
Un vehículo destacado que no figura en la lista es el modelo Dacia Spring, importado de China. Este vehículo, conocido por su precio económico y por pertenecer al grupo Renault, no cumplía las condiciones necesarias para su inclusión.
Las cotizaciones de STLA y TSLA han subido un 2,22% y un 4,56%, respectivamente, durante la sesión bursátil del jueves por la tarde.
Este artículo ha sido producido y traducido con la ayuda de inteligencia artificial y ha sido revisado por un editor. Para más información, consulte nuestros Términos y condiciones.