Madrid, 28 oct (.).- El consejero delegado del BBVA (BME:BBVA), Onur Genç, coincide con el resto de banqueros en que es momento de seguir ayudando a la sociedad, pero no cree que el encarecimiento de las hipotecas por la subida del euríbor vaya a ser "un problema especialmente grave" en España.
La mitad de las hipotecas firmadas en los últimos 5 años son a tipo fijo, por lo que no les afecta el alza del euríbor, ha comentado Genç, y en las hipotecas variables suscritas con anterioridad augura que la subida será "pequeña" pues ya se ha amortizado parte del préstamo.
En cualquier caso, según ha explicado en la rueda de prensa de resultados, son "conscientes" de que habrá clientes a los que les va a subir la hipoteca y pueden necesitar apoyo, por lo que defiende que el sector encuentre fórmulas para actuar en esos casos.
Además, sostiene que el mayor impacto se verá en 2023 cuando se revise buena parte de la cartera hipotecaria con los nuevos tipos que ya están afectando a la demanda de crédito. El banco ha notado una ralentización desde agosto.
NO A LA GUERRA DE DEPÓSITOS
Por otro lado, el número dos del BBVA ha rechazado que vaya a darse una guerra entre las entidades por captar depósitos de los clientes ofreciendo mayores rentabilidades dado que existe en el sistema muchísima liquidez.
El propio banco presume de que cuenta con 108.000 millones que podría usar como avales y a pesar de los cambios en el programa del BCE -los TLTRO- sigue habiendo mucha liquidez y el interés que se paga por los depósitos suele ir ligado a ella.
Aun así, las previsiones del BBVA es que los tipos de interés en Europa suban hasta el 2,75 % a mediados de 2023, ya que después de la subida del BCE de este jueves, prevén otra en diciembre de medio punto y una más de un cuarto de punto en la primera mitad de 2023.
En cuanto al exceso de capital del BBVA, el consejero delegado ha insistido en que quieren invertir el dinero en los países en los que el banco ya está presente con la prioridad de crecer de forma orgánica, con su propio negocio, aunque eso no quita para que exploren oportunidades de compra.
Y una vez más ha defendido el potencial de Turquía a pesar de que existen "muchas vulnerabilidades" que afectan a la economía del país y el resultado obtenido en los nueve primeros meses en la región ronde los 300 millones de euros, cifras que admite que no son lo que esperan en el futuro.
Genç defiende haber aumentado recientemente la participación del BBVA en su filial turca con el horizonte "a largo plazo". "Si lo que creemos se materializa y se alcanza el potencial del país, será una magnífica inversión", ha vaticinado.
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