Nueva York, 18 oct (.).- El Dow Jones de Industriales se dejó hoy 300 puntos más con la prolongación de la mala racha que está viviendo Wall Street, que cayó hoy un 1,27 por ciento y que este mes de octubre ha descendido ya más de un 4 por ciento.
Wall Street cerró una sesión afectada por un amplio abanico de inquietudes, que dejó también en rojo al S&P 500, que hoy cayó un 1,44 por ciento y que este mes se ha deslizado también más de un 4 por ciento.
Sin embargo, el Nasdaq, en el que cotizan importantes empresas tecnológicas, es el que se ha llevado la palma no sólo hoy, al descender un 2,06 por ciento, sino durante todo el mes de octubre, periodo en el que ha sufrido un declive superior al 7 por ciento.
Los expertos apuntaron hoy a varias razones por las que los inversores no estaban de humor, y que en conjunto podrían desembocar en una ralentización de la economía a nivel global.
Por ejemplo, la erosión de relaciones que se han vivido en los últimos meses entre EE.UU y China, que se han enfrentado por la imposición de aranceles que encarecen los productos de ambos países y que podrían llevar a una reducción en el volumen de negocio entre dos de las potencias más importantes del mundo.
También tenían en mente hoy los operadores del parqué neoyorquino la posibilidad de un aumento de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal de EEUU (Fed), la cuarta que podría imponer el organismo en lo que va de año, algo que, según apuntan las minutas de su última reunión, podría producirse en diciembre.
En general, el aumento de los tipos de interés es una medida que los bancos centrales suelen utilizar para limitar la inflación y facilitar que la economía se acelere de manera controlada y saludable, pero también conlleva consecuentemente una moderación del crecimiento.
Wall Street se vio asimismo contagiada por una importante caída de la bolsa china, que históricamente afecta al parqué neoyorquino, y cuyo índice compuesto de Shanghai descendió hoy un 2,9 por ciento hasta niveles de noviembre de 2014.
Por si fuera poco, se sumó la inquietud que provoca la estrecha relación comercial del gobierno de EE.UU con Arabia Saudí, involucrada en el supuesto asesinato del periodista crítico con el régimen Jamal Khashoggi en el consulado saudí en Estambul.
El escándalo y las críticas recibidas por la administración de Donald Trump llevaron hoy al secretario del Tesoro de EE.UU, Steven Mnuchin, a cancelar su asistencia a un congreso de comercio al que iba a asistir en Arabia Saudí.